El Mocito Feliz no tiene nada en contra de nadie. Pero no le gustan las comparaciones. Y estos días anda con la mosca detrás de la oreja por la aparición del pequeño Nicolás, que se ha convertido en el centro mediático. Por ello, el amigo de la farándula malagueño quiere reivindicarse. "Yo fui el primero". Habla de los años de sus comienzos, hace más de 15 años. Le decían que era el Radioman español. "No me gusta que digan que el pequeño Nicolás es el 'Mocito de los políticos'. Ojalá pudiera reservarme los derechos del nombre". Explica, casi indignado, que él se limita a colocarse detrás de los famosos y que todo lo hace con corazón. "Yo todo lo hago sin maldad. No le debo nada a nadie".

Y eso que el Mocito feliz está en un momento dulce. Este mes se estrenó como actor en la gran pantalla en 'Torrente 5'. Cuando se le pregunta si teme que Santiago Segura le sustituya por Nicolás en la próxima de aventura de la saga del famoso detective privado, no duda. "A Santiago le gusta más el Mocito. Yo soy más fino, más educado. Además, él no canta". Enrique Jiménez, su verdadero nombre, reitera su modus operandi: "Yo no me meto con los políticos, me gustan más los artistas, los famosos, la gente de la farándula y ellos me corresponden". Antes de despedirse, insiste: "Soy el chupacámaras de España".