El temporal golpea a Málaga. Los fuertes vientos y las precipitaciones están provocando multitud de incidencias en prácticamente toda la provincia desde primera hora de la madrugada, cuando la alerta naranja ya llevaba horas activada por la Agencia Estatal de Meteorología de Málaga. Sólo el Sistema de Emergencias 112 Andalucía ha recibido varias decenas de llamadas, fundamentalmente por incidencias relacionadas con la lluvia que afectaba a sótanos, viviendas, garajes anegados y problemas con el alcantarillado. Como en Guadalmar, cuyas zonas más próximas al mar se han visto anegadas, o en Puerto Banús, donde el paso a nivel se ha inundado y han tenido que intervenir los bomberos.

Salvo algunos avisos en Marbella o en Álora y Coín, en el Valle del Guadalhorce, la mayoría de las llamadas procedían de comarca de la Axarquía, concretamente de los municipios de Vélez Málaga y Torrox. Sin embargo, las incidencias también están afectando a las carreteras. Tanto es así, que desde el 112 aseguran que el desbordamiento del Guadalhorce ha provocado el corte del camino que une la A-7054 con la A-357 en el municipio de Pizarra. La A-397 ha sufrido desprendimientos en el punto kilométrico 28 a su paso por Banahabís y que hay puntos de agua y barro en la MA-6402, entre Cañete la Real y la Atalaya, y en la A-343 a su paso por Álora. Los operarios de carreteras también trabajan en la MA-3402 a su paso por Almogía por el desprendimiento de una roca. En la capital, el carril izquierdo del túnel de San José se ha inutilizado por la formación de balsas de agua, según el Centro de Gestión de Tráfico de Málaga. El viento también ha causado estragos en varios puntos, como en la carretera de Churriana a Coín, donde la caída de un árbol ha obligado el corte de un carril hacia la MA-21 provocando un atasco.

El servicio del Cercanías entre Málaga y Fuengirola ha sufirdo retrasos entre las 7.23 y las 8.28 horas por culpa de un cortocircuito que provocó la suspensión del servicio en el entorno de Los Prados. Fuentes de Adif han explicado que el fuerte viento provocó la caída de plásticos y chapas en la catenaria del Cercanías, entre la estación de Los Prados y el punto kilométrico 8,5, obligando a cortar el servicio eléctrico y suspender momentáneamente el servicio. Al parecer, los restos caídos en la catenaria provenían de una gasolinera cercana afectada por el tornado que arrasó el entorno del Aeropuerto. La suspensión del servicio afectó a un tren, cuyos pasajeros fueron transbordados a un nuevo vehículo para continuar su viaje. Adif recalcó que el incidente se produjo en una zona de doble vía, lo que permitió restablecer el paso de los trenes casi de forma inmediata por una de las vías, mientras los operarios procedían a la reparación de la catenaria. Sobre las 8.28 horas se pudo restablecer el servicio con normalidad, acumulando sólo algunos retrasos en el horario habitual.