Entre los numerosos personajes de los primeros tiempos del escultismo en Málaga se encuentra Víctor José Jiménez y Malo de Molina. «Viene de Barcelona, su padre es funcionario y hacia 1923 llega a Málaga porque el padre quería un destino con colegio alemán», cuenta Pablo Portillo. Muchos años después de dejar nuestra ciudad, Víctor José Jiménez acompañó al general Muñoz Grandes a la conferencia con Hitler en la famosa Guarida del lobo, su cuartel general, donde hizo de intérprete. Este scout, que llegó a ser un cargo nacional de Scouts de España cuando fueron prohibidos durante el Franquismo, publicó además el libro Mis 50 años de escultismo.

Los Exploradores Malagueños 1913-1936 también desvela el paradero de dos hitos de actividades scouts en los años 30 en la provincia. La segunda de ellas estaba instalada en un refugio en los Montes de Málaga. Se trata del agradecimiento de los scouts a José Almagro Sanmartín y José Martínez-Falero por el refugio. La fecha de la placa, nada menos que junio del 36. La placa la ha localizado Pablo Portillo en el Archivo Histórico Provincial.

Unos años antes, hacia 1934 ó 35, los scouts dejaron una piedra reivindicativa durante un campamento de verano en el Pinsapar de Ronda. La piedra tenía tallada una flor de lis y la leyenda «Protección a los pinsapos». El autor del libro ha dado con el lugar exacto y con un testigo de esa piedra scout, el pastor José Vázquez, que confirmó haberla visto, hasta que fue arrastrada por un desprendimiento de rocas.

El libro concluye con un amplio catálogo de frases anecdóticas y noticias de estos primeros años del escultismo malagueño.