La Agencia de Evaluación y Calidad de los Servicios (Aeval), dependiente del Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas, entregó ayer viernes al Ayuntamiento de Málaga el sello europeo a la excelencia, con el modelo EFQM, que reconoce la calidad en los procesos de gestión aplicados y los resultados obtenidos.
Málaga se convierte así en la única de las seis grandes ciudades españolas cuyo ayuntamiento cuenta con esta acreditación, que mide la aplicación de un conjunto de criterios de excelencia estandarizados que abarcan todas las áreas de funcionamiento de la organización y un conjunto de reglas para evaluar los resultados obtenidos.
Según un portavoz municipal, a diferencia de otras acreditaciones de calidad, ésta no se encarga de constatar que los procesos se llevan a cabo en la práctica de acuerdo a lo establecido por la propia organización, sino que entra de lleno en definir cómo deben ser dichos procesos y los conecta con los resultados que obtiene.
El informe explica que «se ha dotado al personal de los instrumentos necesarios para poder anticiparse y adecuarse al cambio, a través de potentes herramientas informáticas». Además, sobre la formación añade que «se basa en las necesidades fundamentalmente para el puesto de trabajo y se incluye sobre novedades tecnológicas».
