Casi 26.000 menores se encuentran con riesgo de pobreza en la capital, según el Estudio Sobre la Pobreza Infantil en Málaga, que analiza la situación de los menores de 16 años y revela un incremento de las familias atendidas por los servicios sociales y que tienen menores a su cargo.

Los datos que muestra este estudio son demoledores, ya que el 26,3% de los menores de 16 años viven en hogares con ingresos por debajo del umbral de la vivienda. Esto supone casi uno de cada cuatro menores, una cifra que está notándose en un aumento en el volumen de personas atendidas por los servicios sociales de la capital.

Así, durante el año 2013 pasaron por los servicios sociales 8.088 familias con menores de 16 años a su cargo. De estos, el 73% ya habían acudido a estos recursos de ayuda con anterioridad. Pero lo llamativo es la otra cifra, el 27% de familias que recurrió a estos servicios ante el alto grado de precariedad registrado.

El Estudio Sobre la Pobreza Infantil en Málaga dibuja un panorama preocupante sobre la situación de estos menores bajo el umbral de la pobreza. Habitualmente viven en familias con cuatro miembros y en viviendas de alquiler, ya que la falta de recursos le ha impedido comprar una vivienda.

La presencia de población extranjera duplica a la nacional dentro entre las familias con menores atendidas por los servicios sociales. Pero es más, los marroquíes y los nigerianos copan estos recursos de ayuda, al representar más de la mitad (55,3%) de los menores atendidos. Le siguen los sudamericanos (24,1%) y los procedentes de otros países europeos (10,4%), como Rumanía y Ucrania.

Uno de los grandes problemas de este colectivo de familias necesitadas, y que dificulta los intentos de reinserción social, es la falta de formación adecuada. Un alto porcentaje de los responsables de los menores en situación de pobreza no cuenta con los estudios primarios terminados (43%), a los que se suman que otro 7,3% es prácticamente analfabeta.

Esta carencia de educación básica en progenitores y mayores de 16 años que conviven con los menores es una de las grandes rémoras para mejorar su nivel de vida. Desde el punto de vista laboral, la economía sumergida y el paro (71,1%) azotan a las familias con menores a su cargo.