Incluso para aquellos que no son asiduos a coger el transporte público la Semana Santa se convierte en una ocasión para aparcar el vehículo y usar el tren, o en su defecto el metro, que es una opción ya muy solicitada. El transporte público vive uno de sus periodos de oro anuales y las cifras así lo demuestran.
El Ayuntamiento facilitó ayer los datos, que reflejan que el uso global del transporte experimentó un incremento de hasta el 17% con respecto al año pasado. Solo el servicio de la EMT registró un 3,02 por ciento de viajeros más que el ejercicio anterior. Concretamente, 1.258.390 viajeros desde el pasado Viernes de Dolores hasta el Domingo de Resurrección, frente a los 1.221.509 del año anterior. Más de 36.800 personas se decantaron por este servicio.
Destaca su uso el Miércoles y Viernes Santo, con incrementos del cinco por ciento. El Domingo de Resurrección cerraba la Semana Grande y acumuló el porcentaje más alto de nuevos viajeros que observó este transporte. Un 28 por ciento más en comparación con la misma jornada del año anterior. Las líneas más utilizadas fueron las L3, L11 y L1.
Otro dato que destacó el concejal de Movilidad y Accesibilidad, Raúl López, fue que un 30% de los viajeros utilizó el billete ordinario -cerca de un 10 por ciento más que en días laborales- y un 45 por ciento la tarjeta multiviaje.
Sin duda, una de las razones que ha potenciado el crecimiento durante estos días del uso del transporte público ha sido el metro. Abrió el pasado 30 de julio y la Semana Santa es uno de los termómetros que ha medido en su corta vida la aceptación que ha tenido entre los ciudadanos.
El promedio diario durante estos días ha sido de 17.830 usuarios, con picos de demanda de viajeros superior en algunas jornadas, según informó la Consejería de Fomento y Vivienda.
La jornada de mayor afluencia de usuarios fue la del Jueves Santo, con un total de 29.734 usuarios, seguida del lunes, con 24.935, y del miércoles, cuando se registraron 23.524 pasajeros. Hasta 18.326 personas se decantaron por el suburbano el Martes Santo y el Domingo de Ramos alcanzó hasta los 16.648, cifra que triplica a la que se contabiliza durante un domingo habitual.
El Viernes Santo contabilizó un total de 13.541 viajeros, mientras que durante el Sábado Santo y el Domingo de Resurrección utilizaron este sistema de transporte 9.897 y 6.064 pasajeros, respectivamente.
La estación con más afluencia fue la de El Perchel-María Zambrano, intercambiador común a las líneas 1 y 2, y la más próxima al lugar por el que se desarrolla la mayor parte de los recorridos procesionales. Después de ésta, las paradas Palacio de los Deportes, La Luz-La Paz y Ciudad de la Justicia fueron las que tuvieron más afluencia.
El inicio de esta Semana Santa coincidió con el final del mes de marzo y contribuyó a que se convirtiera en el mes con más usuarios. El metropolitano registró un total de 469.460 viajeros, la cifra más elevada desde su inicio el pasado verano.
