­El proyecto de construcción de la obra del metro en el tramo Guadalmedina-Atarazanas ha vuelto a poner de manifiesto la nula voluntad de colaboración existente entre la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento de Málaga, más acrecentada aún si cabe desde que la Consejería de Fomento vuelve a estar dirigida por el PSOE y no por sus exsocios de IU. Ayer se escribió un nuevo capítulo en esta historia de desencuentros, que promete seguir enconándose con las municipales de mayo como telón de fondo. El Ayuntamiento, a través del Área de Movilidad, remitió a la Junta de Andalucía un documento en el que detallan en 25 puntos sus propuestas sobre las afecciones de los desvíos de tráfico con motivo del proyecto presentado hace unos días por Fomento.

El Consistorio afirma en el escrito que si no se solucionan todas las demandas no dará el permiso para iniciar la obra en 20 días, tal y como pretende la Junta de Andalucía con la idea de poder terminar una parte de la actuación antes de la Semana Santa de 2016 y tenerla completa antes de 2017, que es el plazo máximo para no tener que devolver las ayudas.

Entre las medidas propuestas por el Ayuntamiento de Málaga destacan un plan que estudie las afecciones a las líneas del transporte público que especifique las ubicaciones propuestas para las posibles paradas, un plan de accesibilidad a los aparcamientos públicos y privados afectados y un estudio del carril bici alternativo al que actualmente hay en el eje Alameda Principal-Puente de Tetuán-avenida de Andalucía, además de otro que analice la pérdidas de plazas de aparcamiento durante la obra en los ejes viarios Don Juan de Austria, Jaboneros, Pasillo del Matadero y avenida Manuel Agustín Heredia. Por ello también se pide un plano que explique las características, ubicación, accesos y número de plazas de la zona propuesta como aparcamiento «paliativo».

El Consistorio reclama además tener conocimiento de las actuaciones de cada una de las fases de la obra, un plano con las secciones peatonales del viario afectado por las obras y otro plano específico de señalización informativa de los desvíos que afectan a hoteles, centros comerciales, organismos públicos o estacionamientos.

El escrito del Ayuntamiento pone también como requisitos la implantación de carriles bus taxi en Armengual de la Mota, Mármoles, la avenida de la Aurora y la calle Cristo de la Expiración.

Requisitos circulatorios

En el tema circulatorio, se citan medidas en diferentes vías. Entre ellas, en la Alameda de Colón, donde la propuesta del Ayuntamiento es que se mantengan tres carriles de circulación y sentido único, con estacionamientos en batería y en línea tal como existen actualmente adaptándose a la nueva ordenación al cambiar el sentido de la circulación. En cuanto a la Alameda Principal, se mantendría el vial sur reservado con un carril central de circulación para residentes, carga y descarga y el resto reservado a carril bus taxi. Se deberá garantizar el giro del autobús del carril central. El tronco central de la Alameda Principal se ordenará en sentido único oeste con dos carriles bus. Respecto a la calle Córdoba, se dispondrá en doble sentido con dos carriles y se deberá mantener la parada de taxis y la zona de carga y descargas. El Paseo del Parque y el Paseo de los Curas seguirían con la disposición actual. Y el vial Boquete del Muelle, entre el Parque y la plaza de la Marina, también quedaría ordenada con doble sentido de circulación.

Otras de las exigencias del Ayuntamiento para dar luz verde a las obras es que se mantenga el espacio viario comprendido entre la calle Larios y Puerta del Mar, de manera que se mantenga la parada de taxi y a su vez se permita la salida del aparcamiento de la Marina.