Los distritos de Campanillas y de Teatinos carecen de mercados municipales y los vecinos de ambos distritos vienen desde hace años reclamando su apertura. El Ayuntamiento los prometió también hace años, pero finalmente ha puesto en manos privadas su ejecución. Será el sector privado quien los construya, los financie y los gestione, si bien tendrá la supervisión pública municipal.

Después de probar con éxito esta fórmula con el mercado de la Merced, el equipo de gobierno municipal ha decidido aplicarla también para dotar a Teatinos y Campanillas de sendos mercados. La junta de gobierno local aprobó ayer los anteproyectos y estudios de viabilidad económica para la construcción de un mercado en Teatinos y otro en Campanillas, cuyos edificios albergarán también otros usos compatibles.

El promotor que quiera construir un mercado en Teatinos tendrá que realizar una inversión mínima de 6.691.731 euros para acometer el proyecto y, además, abonar un canon al Consistorio de 105.000 euros anuales.

El mercado se ubicará en la calle Maestro Jiménez, tendrá una superficie construida de 8.193 metros cuadrados, de los que 2.490 se destinarán al mercado (68 puestos), 2.398 a otros usos comerciales y 3.318 a zonas comunes, incluido un aparcamiento de 99 plazas.

En cuanto al mercado de Campanillas el promotor tendrá que hacer una inversión mínima de 4.630.227 euros y abonar al Consistorio un canon de 50.000 euros anuales. El mercado se levantará en la calle Tiziano, en una parcela de 5.162 metros cuadrados. Tendrá 31 puestos en planta baja y tres más.

Lo atractivo empresarialmente de esta operación es la posibilidad de poder dedicar la mitad de la superficie a usos comerciales distintos al mercado y con clara vocación de rentabilidad. En concreto, la mitad del espacio podrá dedicarse a supermercado, cafetería, restaurante, otras actividades hosteleras e incluso guarderías.

El portavoz del equipo de gobierno, Mario Cortés, aseguró que los estudios de viabilidad económica son «tremendamente ajustados y realistas y aseguran que es posible obtener rentabilidad en un espacio razonable de tiempo.

Los mercados se regirán por la fórmula de concesión de obra pública y tendrán una gestión indirecta; el adjudicatario los construirá y explotará por un plazo de 50 años y se encargará de la explotación de los puestos a los comerciantes, teniendo el Ayuntamiento la potestad de inspección y control.