Alfonso Muñoz y su hijo Fonsi, los dos malagueños que han vivido el terremoto de Nepal en primera persona, han llegado este mediodía a Málaga. De 68 y 38 años, estos malagueños han estado durante un mes haciendo una ruta de montaña por el país, del que están enamorados y que visitan con asiduidad.

"Somos afortunados, hemos salido del país sin un solo rasguño", ha asegura Alfonso Muñoz a la decena de periodistas que se han dado cita en el aeropuerto malagueño para recibirlos.

Esta familia adoptó hace años a Neema, una joven que ha esperado los momentos más intensos de su vida en el aeropuerto de Málaga junto a su madre Mariví.

Ambas han vivido con expectación la llegada de sus familiares, aunque no han sufrido la incertidumbre de qué podía haber sido de ellos porque, como ha contado la hija, recibieron un mensaje en el móvil alertando de su buen estado de salud antes de conocer qué había sucedido exactamente en Nepal.

El aeropuerto, lleno de fotógrafos, cámaras de televisión y periodistas, ha vivido una jornada inolvidable.