El presidente de la Confederación de Empresarios de Málaga (CEM), Javier González de Lara, que fue reelegido ayer como máximo responsable de la patronal para los próximos cuatro años, mostró su confianza en que 2015 marque definitivamente «un punto de inflexión» para volver a iniciar una etapa de crecimiento y desarrollo que permita la generación de empleo neto. González de Lara, que encara ahora su segundo mandato al frente de la CEM, comentó que la prioridad básica de las empresas en esta nueva etapa debe ser «la apuesta por el empleo» y «el repunte de la actividad productiva», aunque recordó que para ello necesitan un compromiso de los partidos políticos que permita dotar de gobiernos «estables» a las instituciones para generar así «confianza» y facilitar las inversiones y los nuevos proyectos empresariales.
El responsable empresarial recordó además a este periódico que durante la crisis han desaparecido más de 14.000 empresas en Málaga (unas 55.000 en Andalucía), un músculo que «costará mucho recuperar». Por ello, invitó a los poderes públicos a desarrollar una «hoja de ruta» que genere estabilidad y consolide el «cambio de tendencia» que, a su juicio, se viene vislumbrando.
«Esperamos encontrar ya un escenario más favorable para la inversión y la actividad económica. Los últimos ocho años han sido durísimos, los hemos sufrido todos, pero se está produciendo ya un punto de inflexión para iniciar el crecimiento», comentó.
Respecto a las elecciones del pasado domingo, el reelegido presidente de la CEM señaló que observa el nuevo panorama político «con expectación e ilusión», ya que los ciudadanos han decidido «una regeneración» del actual escenario. «Creo que es momento de recuperar el diálogo y la mano tendida, algo que se había olvidado. Hay que pensar que no siempre existen las mayorías absolutas», afirmó el responsable de la CEM, que demandó a los partidos «altura de miras» para constituir los ayuntamientos «de forma sensata e inteligente y crear estabilidad».
Pese a reconocer que la gobernabilidad en muchos casos será «compleja», afirmó que estamos en un «tiempo nuevo» que exige «más voluntad de diálogo». Por ello, pidió que se respeten «las líneas de gobernabilidad» y apeló al sentido común, el rigor y la viabilidad de las propuestas para establecer pactos.
González de Lara, que también preside la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA), demandó además una solución urgente que permita la constitución de un gobierno en la Junta de Andalucía, recordando que las empresas «no pueden esperar ya más». «El estado de interinidad de la Junta de Andalucía provoca parálisis y está haciendo perder inversiones», aseguró.
El presidente de los empresarios resaltó también su intención de seguir manteniendo un diálogo fluido con los sindicatos y de avanzar en la transformación del tejido empresarial malagueño que, a su juicio, necesita mayor dimensión, más cauces de financiación y una continuidad en su apuesta por el mercado exterior.
Elegido en candidatura única. La CEM, que integra a casi un centenar de organizaciones que representan a más de 45.000 empresas y autónomos de la provincia, revalidó a González de Lara en su cargo como presidente para los próximos cuatro años en el transcurso de una asamblea electoral en la que no hizo falta ni siquiera votar, ya que sólo se presentaba una candidatura, que fue refrendada por aclamación. González de Lara llegó a la presidencia de la CEM en 2011 relevando a Vicente García en el cargo.
El nuevo comité ejecutivo de la CEM, junto a González de Lara, estará formado por Jerónimo Pérez Casero, Natalia Sánchez y Sergio Cuberos como vicepresidentes; Esteban Bueno como tesorero y Javier Noriega como contador. Como vocales figuran Baldomero Bellido, José Carlos Escribano, Juan José González Ramírez, María Paz Hurtado, Emilio López Caparrós, Francisco Rodríguez Macías y Antonia Ruiz Oliva.
En el caso de Natalia Sánchez, su papel como secretaria general de la CEM se refuerza además con su nombramiento como vicepresidenta ejecutiva.
