Un detalle salta a la vista en el cartel que en la fachada anuncia el Museo del Patrimonio Municipal (MUPAM): la traducción al inglés es City Museum. Cuando se le señala este matiz al director, el historiador y académico de San Telmo Elías de Mateo, sonríe.

Puede que administrativamente siga siendo el MUPAM pero a todos los efectos -incluidos por supuesto los expositivos- cada vez está más cerca de ser el Museo de la Ciudad de Málaga.

«No he querido hacer una revolución, soy un reformista y tenemos la idea de que el Museo del Patrimonio Municipal cuente la Historia de la ciudad y al final sea el Museo de la Ciudad», resume Elías de Mateo.

Este cambio de rumbo se dio a conocer durante la pasada Noche en Blanco, cuando se presentó, entre otras novedades la versión beta de un programa informático que como señala la subdirectora del MUPAM, Elisabel Chaves, «va más allá de las habituales maquetas de los museos de la ciudad en todo el mundo». Se trata de un paseo interactivo, con control tipo kinect, sin necesidad de mandos, por cinco momentos de la Historia de Málaga: la Málaga fenicia, romana, árabe, la del XVII y la del XIX. Y muy pronto podrá pasearse por la Málaga de 1950. Los mapas interactivos se encuentran en el vestíbulo del edificio.

La tecnología ha sido posible gracias a un proyecto de la Escuela Superior de Telecomunicación, bajo la dirección de la profesora Cristina Urdiales. La empresa encargada de recrear estas málagas del pasado ha sido la malagueña Nixure, con Miguel Leiva y Víctor Andrey al frente.

Precisamente, fue un artículo el año pasado en La Opinión sobre la recreación de la Málaga árabe que había realizado Miguel Leiva como proyecto final del grado superior de Ilustración -tras 200 horas de trabajo- lo que dio a conocer al MUPAM la obra de este artista malagueño de 31 años.

«Para la Málaga fenicia (siglo VI a. C.) y romana (siglo II d.C.) hemos contado con el asesoramiento del catedrático de Arqueología Pedro Rodríguez Oliva», explica Elías de Mateo. Gracias a la parte tecnológica, al usuario le basta con extender una mano para moverse por estas málagas del pasado y conocer hasta el mínimo detalle, así como la historia de los principales monumentos.

Con las sucesivas mejoras de este programa, las seis málagas con las que contará el museo podrán superponerse y tendrán Google Maps, para subrayar que los visitantes se mueven en el mismo espacio habitado desde hace miles de años «y que las recreaciones no son abstracciones lejanas e inconexas», dice Elisabel Chaves.

La Malaka fenicia es casi una aldea junto a la que pasa, no el río Guadalmedina sino el que luego se conocería como el arroyo del Calvario y que en nuestros días está recordado en la sinuosa calle Granada, por donde culebreaba. En cuanto a la Malaca romana, aparecen unas termas en la calle Císter. «No hay referencias visuales pero sí escritas y las he copiado de unas termas de Híspalis», señala Miguel Leiva, que precisa que para estas recreaciones ha contado con toda la documentación que le ha aportado el MUPAM.

En el siglo II en Malaca también encontramos un circo a la altura de la plaza de la Merced, un gran templo en la zona de la actual Catedral, el teatro romano y como curiosidad, se trata de una ciudad sin murallas. «Hemos escogido la época de esplendor de cada cultura y en el siglo II d.C. la paz en el imperio es total. No se construirán murallas hasta el siglo III», comenta Elías de Mateo.

Para la ciudad árabe Miguel Leiva ha retocado la ilustración de 3 gigas que realizó para su trabajo de fin de grado, mientras que lo más llamativo de la Málaga contemporánea de El Quijote es la presencia de una Catedral a medio construir, mientras en la otra mitad se mantienen los restos de la antigua mezquita. «Lo que la gente no se da cuenta es que la imagen de la Catedral fue así; la construcción estuvo parada 150 años hasta mediados del siglo XVIII», recuerda Elías de Mateo.

Por último, y a la espera de recrear la Málaga de 1950, también se ha recreado la ciudad hacia 1880, con el puerto primitivo, la casi recién estrenada plaza de toros y las humeantes fábricas en el extrarradio.

El MUPAM también ha aprovechado un espacio de transición para instalar una gran pantalla horizontal y ofrecer una producción audiovisual animada por ordenador de los malagueños Forgotten Fantasies que va de la Málaga fenicia a la conquista por los Reyes Católicos. El hilo conductor es el fondo del mar.

Esta película se complementará con piezas arqueológicas y enlaza ya con las salas 1, 2 y 3 que cuentan la Historia de Málaga desde el siglo XV a la actualidad, salas con pantallas audiovisuales interactivas. Otra forma de contar la Historia de Málaga en el MUPAM... Museo de la Ciudad, para entendernos.