La formación de Albert Rivera en Málaga ha decidido crear una mesa de seguimiento del acuerdo al que llegó con el Partido Popular que facilitó hace poco más de una semana la investidura de Francisco de la Torre como alcalde de la ciudad. Esgrime el principio de su oposición a que sean políticos quienes ocupen puestos de carácter técnico, algo que "va en detrimento de la gestión del servicio y choca con la filosofía del acuerdo de investidura y del propio partido naranja". Se refiere concretamente a la recuperación por parte del alcalde de cuatro exediles de la corporación anterior, que pese a no conseguir el acta de concejal en estas últimas elecciones, han sido repescados como directores de distrito y técnicos: Mar Torres, Luis Verde, José del Río y Eva Sánchez.

Ayer mismo, el líder de la formación naranja en Málaga, Juan Cassá, también explicaba a La Opinión su postura sobre el mantenimiento en sus puestos por parte del Ayuntamiento de ocho directivos municipales (un coordinador y siete directores generales) que no son funcionarios, un requisito que se pide ahora para los nuevos nombramientos. La reforma de la Ley de de Bases de Régimen Local, aprobada en 2013, obliga a que este tipo de altos cargos los ocupen funcionarios de carrera. Sin embargo, los ocho directivos municipales fueron nombrados en 2011 y no han cesado en sus puestos al inaugurarse el nuevo mandato de De la Torre, por lo que continuarán con su trabajo al no tener carácter retroactivo la modificación de la norma. Cassá insiste en que prefiere funcionarios o técnicos para estos puestos pero que la postura del Ayuntamiento es legal. "No lo veo correcto, no estoy de acuerdo, pero no lo podemos cambiar. La ley es la ley", afirma Cassá. El portavoz de Ciudadanos asegura que va a extremar el control y que "lucharé en el pleno" cada asunto que crea que perjudique "a los malagueños".

Ciudadanos recalca que el acuerdo al que llego con el alcalde de la ciudad incluye la reducción del 50% de los cargos de confianza, para ahorrar "más de cuatro millones de euros al Ayuntamiento". "Ciudadanos y PP -continúa- acordaron la amortización de las direcciones de distrito, además de otros cargos como el director del Instituto Municipal del Libro, el director del Instituto del Taxi, el director de Polígonos, el director de Nuevas Tecnologías, el asesor de Coordinación de Áreas y la unificación bajo una misma gerencia de las sociedades del teatro Cervantes y el festival del Cine". Después de las últimas decisiones municipales, Ciudadanos va a constituir una mesa de seguimiento "para asegurar que se cumpla el acuerdo de investidura".