Las tres concejalas y el concejal de Málaga Ahora en el Ayuntamiento se han impuesto un tope salarial en su sueldo, de forma que ninguno perciba más de tres veces el salario mínimo interprofesional, es decir unos 1.935 euros al mes. Para empezar, y durante los primeros seis meses, han acordado que cobrarán unos 1.600 euros al mes netos, lo que supone unos 800 euros menos que el sueldo establecido. Esta diferencia se destinará a devolver los microcréditos recibidos por ciudadanos para financiar la campaña electoral.

La portavoz de Málaga Ahora, Ysabel Torralbo, explicó que los ediles de su grupo municipal perciben el sueldo normal de un concejal (unos 2.400 euros al mes) y pagan los impuestos correspondientes a esta cifra. No obstante, lo que realmente percibirán nunca superará los 1.935 euros, destinándose la diferencia a financiar la constitución de un fondo social. Esta diferencia será incluso mayor hasta final de año, plazo en el que se quieren devolver los 20.000 euros recibidos en microcréditos ciudadanos.

A partir del año próximo, el sueldo se determinará en asamblea interna, pero en ningún caso superará los 1.935 euros y, los cerca de 500 euros sobrantes alimentarán un fondo social. Ysabel Torralbo señaló que el destino de este dinero se determinará en asamblea, pudiendo ser destinado a ayuda social con alguna familia en situación de riesgo, una donación a una asociación, un fondo de emergencia o para crear una caja de resistencia con la que abonar posibles multas ante la llamada «Ley Mordaza».

Torralbo recalcó que la cifra estipulada como sueldo para los ediles «es suficiente para tener un salario digno, que no favorezca la precariedad en el trabajo, pero que esté más cerca de la realidad social que hay en Málaga». «Creemos que se puede vivir bien con ese dinero», insistió la portavoz de Málaga Ahora.