El Ayuntamiento de Málaga, a través de la Gerencia Municipal de Urbanismo (GMU), ha adjudicado el proyecto de urbanización de las calles Casapalma y Cárcer a la empresa Eiffage Infraestructuras, SA por un importe de 616.418 euros y un plazo de ejecución de cinco meses.
Este proyecto se enmarca en el programa Iniciativa Urbana, cofinanciado con fondos Feder que el Consistorio malagueño obtiene por sobreejecución gracias a su gestión de estos fondos. Se trata de actuaciones coordinadas entre el servicio de Programas Europeos, Urbanismo, distrito Centro y el área de Movilidad, en torno a las que se han mantenido reuniones con los colectivos y asociaciones vecinales y de comerciantes de la zona para explicarles las obras.
La propuesta trata de peatonalizar en la mayor medida posible estas vías, dejando un uso restringido para el tráfico rodado, explicó, a través de un comunicado, un portavoz municipal.
La idea es dar continuidad a la unión desde la plaza Uncibay hasta el Teatro Cervantes, motivo por el que nació la calle Cárcer, mediante un eje de naranjos en la margen izquierda, que se extiende por los tres tramos que componen la actuación.
Los materiales a utilizar serán Sierra Elvira y crema ámbar, usados en las calles adyacentes en despieces proporcionales al propuesto. Las zonas peatonales se dibujarán en mármol crema, dejando la Sierra Elvira para regularizar encuentros y para la zona de tráfico. También se dispondrá una franja en mármol rojo travertino que cruzará el tramo intermedio, marcando el trazado de la antigua muralla medieval.
La propuesta busca dotar a la calle de un paseo agradable bajo los árboles, ya que por su orientación noreste-suroeste es muy soleada. El hecho de que esté todo al mismo nivel facilita el tránsito peatonal. Previo al inicio de las obras, se realizará el proyecto de investigación arqueológica.
