La Audiencia de Málaga ha condenado a 10 años de prisión a un hombre por abusar de su nieta cuando tenía cinco años, aprovechando que pasaba fines de semana con su padre, hijo del acusado, que residía en la misma vivienda. Además, se le prohíbe comunicarse con la menor o acercarse a ella a menos de 500 metros durante 11 años.

Según se declara probado en la sentencia, a la que ha tenido acceso Europa Press, el procesado vivía con su hijo, padre de la menor, con el que la niña pasaba los fines de semana durante los años 2009 y 2011, ya que sus progenitores se separaron poco después de nacer ella.

Así, el acusado, aprovechando que la menor estaba en su domicilio y que compartía con él su habitación, abusó "reiteradamente" de ella, realizándole tocamientos. La niña no sufrió lesiones físicas, dice la resolución, pero sí ha tenido que someterse a tratamiento psicológico.

Por esto, se le condena por un delito continuado de abusos sexuales. El Tribunal señala que la menor ha mantenido un relato "coherente y coincidente" en todo momento y en sus declaraciones con los psicólogos, y descarta que hayan podido existir otros motivos para denunciar estos hechos.

Además de la pena de prisión y el alejamiento, se le impone una medida de libertad vigilada con una duración de cinco años, a verificar una vez cumplido lo anterior y que consiste en someterse a un programa de reeducación sexual. También deberá indemnizar con 20.000 euros a la menor, por el "evidente daño moral causado".