El Puerto de Málaga vuelve a contar en sus amarres con el megayate 'Radiant', y lo hará previsiblemente hasta este jueves por la noche. Su propietario se dedica al sector de la automoción en los Emiratos Árabes, y los 240 millones que desembolsó en 2009 al magnate ruso Boris Berezovsky lo convierte en el más caro del mundo.

Tiene 110 metros de eslora y una capacidad para albergar a un total de 16 pasajeros y a más de cuatro decenas de tripulantes. En su interior se hallan dos piscinas, un jacuzzi, un helipuerto, un gimnasio y hasta un cine propio, que hacen de esta embarcación las delicias de sus pasajeros.

Las medidas de seguridad con las que cuenta también van acordes a su precio, y es que cuenta con la capacidad de responder ataques de otras embarcaciones a una distancia de 100 metros, además de una lancha de apoyo y de armas de fuego sónico que emiten ondas de sonido de baja frecuencia capaces de reventar los tímpanos de posibles intrusos.

No es la primera vez que arriba en la ciudad, pero cada vez que llega esboza rostros de perplejidad entre los presentes y comerciantes de la zona. Su calado es de 4,40 metros, con una manga de 16,30 metros y una velocidad de crucero de 16 nudos. Tampoco es Málaga la única urbe que ha podido visualizar esta joya de la embarcación. Valencia e Ibiza la pudieron vislumbrar hace unos años.

Llama la atención que Al Futtaim compró este barco un año antes de que estuviese listo para navegar. Su construcción fue ordenada por el anteriormente mencionado magnate ruso, y acometida por el astillero germano Lurssen.

Al Futtaim es la cuarta persona con más riqueza de los Emiratos, y la prestigiosa lista que elabora Forbes lo sitúa en el puesto número 557. Su fortuna está estipulada en 3.200 millones de dólares y posee un total de 65 empresas con más de 30.000 empleados bajo su mando. Distribuye en exclusiva vehículos de Honda y de Toyota, así como es propietario de varias franquicias como la de Ikea, Toys R Us o Marks&Spencer.

Por otro lado, el magnate árabe también se ha atrevido con el sector de la construcción, en concreto impulsó la lujosa comunidad urbana Dubai Festival City, ubicada en Catar.