La noria del puerto empezará a funcionar oficialmente el jueves, aunque ya esta tarde ha comenzado a realizar sus primeros viajes con público en fase de pruebas, tras superar de forma satisfactoria las pruebas de carga de cimentación. Según fuentes de la Autoridad Portuaria, con la solución de este paso se libera el trámite técnico y sólo queda que Mederyt, la empresa encargada del montaje de la estructura, presenta un informe técnico final del montaje y obtener la autorización del Puerto.
La apertura de la noria esta tarde con las pruebas de carga en condiciones reales supone admitir público por primera vez, pero con algunas limitaciones. No obstante, lo que sí parece claro es que la presentación oficial será el próximo jueves, momento a partir del cual empezará a funcionar con normalidad.
Los primeros viajes de prueba han permitido publicar las primeras vistas desde la parte alta de la estructura, que la empresa Mederyt, que monta la noria, ha difundido a través de su cuenta de Twitter (@noriaprincess). Esta primera fotografía permite apreciar una vista de la Catedral y del Centro desde la noria, ofreciendo una idea de lo que los usuarios se pueden encontrar.
La noria cuenta con una altura de 70 metros, lo que permite elevarse incluso por encima de La Equitativa. Sus 42 cabinas climatizadas ofrecen la posibilidad de realizar viajes durante todas las épocas del año, con idea de que esté en funcionamiento desde las 11.00 hasta la 1.00 horas de la madrugada, al menos en los fines de semana. El coste del viaje rondará los 7 euros, aunque todavía tiene que cerrarse todo el sistema de tarifas.
Guardia Civil. Como anécdota, el montaje de la noria ha obligado a cambiar el aparcamiento de las dependencias de la Guardia Civil en el Puerto de Málaga. Al parecer este espacio quedaba bajo el giro de la rueda, con un radio de casi 70 metros. Esto obligó a desplazar el aparcamiento hacia el Oeste, para alejarlo de la noria y mantener un arco de seguridad bajo la estructura.
Fuentes de la Guardia Civil subrayaron que la Autoridad Portuaria resolvió rápidamente el problema, simplemente desplazando las vallas que delimitan el aparcamiento.
