La noria del puerto ha venido a Málaga para quedarse. Al menos eso espera Santiago Sardà, uno de los responsables de la empresa Mederyt, que gestiona esta atracción, y que ayer durante su presentación aseguró que la estancia prevista de ocho meses en Málaga se podrían convertir en permanente «si el público responde».

Sardà, que adelantó que la noria seguirá funcionando en pruebas con público hasta el 8 de septiembre, cuando se haga la apertura oficial, explicó que en Andorra se ha decidido dejar la estructura como un atractivo en la ciudad y ya se está hablando de esta posibilidad en Zaragoza.

Durante estos primeros días en funcionamiento, la noria admite público, pero con viajes de prueba. «El funcionamiento es normal, pero todavía estamos ajustando todo y por eso la presentación oficial no la haremos hasta el 8 de septiembre», apuntó el responsable de Mederyt, quien indicó que para esa fecha -fiesta local al coincidir con el día de la Virgen de la Victoria- se hará una fiesta de presentación.

Sardá confirmó que los precios oscilarán entre los 10€ y los 6€, aunque insistió en que se primará a los grupos y familias, que pagan una tarifa reducida. También adelantó que se dará cabida a colectivos con pocos recursos y colegios, para facilitar el acceso a la mayor cantidad de gente posible.

Eso no evitó cierta polémica en las redes sociales por los precios. De hecho, el propio alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, animó a la empresa a plantear precios más bajos.

El presidente de la Autoridad Portuaria, Paulino Plata, subrayó la importancia de la llegada de la noria a la ciudad y, en especial, al puerto. Así, apuntó que es un revulsivo para los comercios del entorno y un atractivo turístico de gran importancia.