Más clases de apoyo y refuerzo educativo, más planes de ayuda a las familias, renovación de libros de texto y otro curso más, la férrea oposición de la Junta de Andalucía a la implantación progresiva de la Lomce. Hay cosas que nunca cambian y que los políticos se encargan de poner en evidencia. Esté quien esté al frente de la Consejería de Educación. El nuevo año académico comienza hoy para 156.712 escolares de Infantil, Primaria y Educación especial. Vuelve el cole para ellos. Regresa el ajetreo en pasillos y aulas. El reencuentro. La transmisión de conocimientos y valores.

El delegado del Gobierno andaluz, José Luis Ruiz Espejo, y la delegada territorial de Educación, Patricia Alba, presentaron ayer las principales novedades del curso y las grandes cifras. Y aprovecharon la oportunidad para atacar al Gobierno central y su política de recortes, como si estos solo llegaran de Madrid.

Así, Ruiz Espejo destacó que la educación pública de calidad sigue siendo uno de los principales pilares de las políticas de la Junta de Andalucía, «una educación pública abierta a todos los sectores de la sociedad y en la que las dificultades económicas no sean un impedimento para un acceso normalizado de las familias y sus hijos». De hecho, el 96,5% de los alumnos estudia en un centro sostenido con fondos públicos, entre los que también se incluyen los concertados.

«A pesar de los recortes del Gobierno central en materia educativa, el Gobierno andaluz tiene como principal objetivo que la Educación pública no sea un lujo», subrayó. Por su parte, Alba sacó la vara para zarandear la nueva ley educativa, que este año ya afecta a toda la Primaria, primero y tercero de la ESO y primero de Bachillerato. «Hemos hecho un gran esfuerzo para limitar sus efectos más perniciosos», dijo la delegada.

La Lomce entra en vigor para casi 145.000 alumnos de la provincia: los más de 106.770 de Primaria, en torno a 35.000 de Secundaria y alrededor de 2.900 de FP Básica.

Patricia Alba añadió también que «la Junta de Andalucía mantiene y refuerza un curso más todas las medidas de apoyo al éxito escolar y las ayudas a las familias, tan necesarias en la época en que nos encontramos». «En ese sentido, Andalucía mantiene el programa de gratuidad de libros de texto, que beneficia a casi 170.000 escolares en la provincia. De ellos más de 102.892, que corresponden a Primaria de centros públicos y concertados, renovarán todos sus materiales», añadió. Y lo harán después de seis años sin hacerlo, en algunos casos, por lo que los libros ya presentaban un estado deplorable.

Del mismo modo, la Junta de Andalucía continúa manteniendo el transporte escolar gratuito, y un año más no varían los precios públicos de los comedores escolares, aulas matinales y actividades escolares, al igual que las bonificaciones sobre los mismos en función de las circunstancias familiares. «Todas estas medidas suponen en su conjunto un ahorro a las familias andaluzas de en torno a 2.000 euros anuales», indicó el delegado del Gobierno. Respecto a las becas, «una herramienta imprescindible para garantizar la igualdad de oportunidades para todo el alumnado, la Junta de Andalucía mantiene las convocatorias de la Beca 6000, de las Becas Segunda Oportunidad y de las Adriano, que la Junta tuvo que crear para compensar al alumnado perjudicado por los recortes del Gobierno central». Asimismo, la Consejería continúa manteniendo los programas de lucha contra el absentismo.