­El portavoz del grupo municipal de IU-Málaga para la Gente en el Ayuntamiento de la capital, Eduardo Zorrilla, pedirá en el próximo pleno de la corporación que el Consistorio asegure el «mínimo vital» de suministro de agua por persona y día establecido por Naciones Unidas a familias sin recursos.

Zorrilla demandó ayer que el Ayuntamiento se adhiera al Pacto Social del Agua y que impulse los objetivos que éste marca, entre los que se encuentran la prohibición de los cortes de suministro, asegurar un mínimo vital por persona y día y garantizar tarifas sostenibles.

También se pide que el dinero del agua se reinvierta sólo en este ámbito, aumentar el control social sobre los recursos, el respeto al medio ambiente o que la gestión pública del suministro sea un elemento de creación de empleo.

En este sentido, Zorrilla resaltó que resulta «fundamental» garantizar una dotación mínima, cuyo valor debería concretarse, pero que en el contexto mundial está entre 60 y 100 litros por persona y día, y el compromiso de no cortar el suministro en caso de impagos justificados socialmente.

En definitiva, Málaga para la Gente reclama un modelo de gestión pública del agua participativa, sin ánimo de lucro, como servicio de interés general, ya que «el agua no es una mercancía, sino un bien común y un derecho fundamental, además de elemento esencial para la vida».

A su vez, Málaga para la Gente-IU rechaza que se vincule el «necesario equilibrio financiero de la empresa de aguas Emasa únicamente a la nueva tarifa del agua», por lo que aboga por que se tengan en cuenta todas las previsiones de ingresos y de gastos de la empresa, no sólo los ingresos que se dejan de obtener con las propuestas de nuevos tramos y tarifas que los grupos proponen, «acabando con los derroches y externalizaciones innecesarias que suponen aumentar los gastos de Emasa».

En este sentido, Zorrilla señaló que «la mercantilización del agua no puede derivar en que para presentar una buena cuenta de resultados, Emasa incremente las tarifas, perjudicando a los usuarios, sin que se haga un esfuerzo por reducir, por ejemplo, las elevadas retribuciones de 16 directivos de la empresa o los gastos excesivos en dietas y viajes», concluyó.