La Junta de Andalucía ha dejado el camino libre a que fondos de inversión extranjeros se hagan con casi 40% de las acciones de Metro de Málaga y, por tanto, sean los socios de referencia en la sociedad. La Agencia de Obra Pública de la Junta de Andalucía (AOPJA) ha anunciado que renuncia a sus derechos de compra preferente de las acciones, condición necesaria para que Sando, Azvi y Cajamar concretaran la venta de su 39,40% de acciones a dos fondos de inversión de Francia y Australia, que abonarán una cifra sensiblemente superior a los 100 millones de euros.

Tras la renuncia de la Agencia de Obra Pública, la operación de compraventa continúa los trámites establecidos en los estatutos de la sociedad concesionaria Metro de Málaga, con el inicio del plazo para la adquisición preferente por parte del resto de socios (Globalvía, FCC, Comsa y Vera), que tienen un periodo de 15 días para pronunciarse sobre el ejercicio o no de dicha opción.

Una vez pasado ese plazo, en el que parece que no habrá cambios, el acuerdo se hará finalmente efectivo, lo que permitirá la entrada en el accionariado de dos fondos de inversión internacionales especializados en infraestructuras y concesiones de transportes, el australiano Macquarie Group y la francesa InfraVia.

La Consejería de Fomento y Vivienda, de la que depende la AOPJA, ha asegurado que su renuncia a comprar las acciones no impiden que mantenga su objetivo de velar "para que el servicio de transporte que presta la sociedad concesionaria siga cumpliendo los parámetros de calidad, fiabilidad y eficiencia establecidos en los pliegos y en el contrato de la concesión administrativa del metro". Hay que recordar que la administración autonómica controla, a través de la Agencia de la Obra Pública, el 23,69% de las acciones.

La Consejería de Fomento cuenta además, por contrato, con el derecho a fijar aquellos elementos esenciales del metro, como el sistema tarifario o regular el servicio, independientemente del número de acciones que controle.

Para la Consejería de Fomento, el interés internacional por Metro de Málaga, pese a llevar apenas un año en explotación parcial, "pone en valor que la apuesta del Gobierno andaluz por esta infraestructura está sustentada en un modelo solvente".