«Si buscas resultados distintos, no hagas siempre lo mismo» (Albert Einstein). La frase describe la idea que un día el joven malagueño Francisco Martín puso en marcha: un modelo de negocio innovador y diferente en el sector de la telefonía móvil, basado en «la inmediatez, la eficacia y los precios bajos».
El resultado es Manzana Rota, la tienda de reparación de teléfonos móviles que se estrenó en noviembre de 2013 en la calle La Unión, en un taller sencillo de apenas 54 metros cuadrados. Pero según explica Fran Martín, uno de los propietarios y gerente, este lugar sería «un espacio en el que los empleados pudieran trabajar bien, y los clientes recibieran una atención cercana».
El proyecto se puso en marcha sin ningún tipo de dificultad y también sin subvención, con una inversión inferior a los 5.000 euros por parte de los propietarios para la creación de la primera tienda en la Cruz del Humilladero.
Manzana Rota contaba al comienzo con un único trabajador, Abraham Garrido, al que se fueron sumando nuevos empleados hasta llegar a la actual plantilla de 22 trabajadores.
De la mano de este continuo progreso, la empresa ha ganado reconocimiento, algo que se refleja en el número de reparaciones que realiza al día: la cifra ronda los 200 teléfonos.
Asimismo, surgió la necesidad de un espacio mayor, por lo que su propietario se puso en la difícil tarea de buscar puntos estratégicos en la Costa del Sol para la apertura de una segunda tienda, y surgió así la propuesta de un local en el Centro Comercial Plaza Mayor.
La oportunidad de una segunda tienda ha representado para la empresa un gran logro en el que han tenido que trabajar empleados y propietarios de la mano en diferentes proyectos. Uno de ellos, el cambio de imagen para presentar en la gerencia del centro comercial, así como la restauración del local previsto, en el que se han llevado a cabo obras para la distribución del espacio destinado a las reparaciones, además de la zona dedicada al público.
El interés de crear la tienda en el Plaza Mayor, explica el gerente de Manzana Rota, no es más que brindar a los clientes un espacio de ocio en el que no tengan que esperar sentados sino que puedan aprovechar el tiempo de las reparaciones en otras actividades que brinda el mismo centro comercial.
Una semana después de la apertura de la segunda tienda Fran Martín califica este proyecto como «exitoso».
El nuevo espacio, situado en el local 79 del Centro Comercial Plaza Mayor, contará con entre 10 y 12 trabajadores, dependiendo de los días con mayor demanda, y empleados de la calle La Unión se desplazarán hasta allí para cubrir la demanda de las reparaciones.
En las redes sociales
La tienda de reparaciones de móviles Manzana Rota ha dado una oportunidad a jóvenes que por diferentes razones no encontraban trabajo. Para la selección, Fran Martín explica que «todos los empleados han sido seleccionados de Facebook, por lo que no he buscado en ningún lugar de empleo».
Este ha sido el caso de David Sánchez, un malagueño de 33 años que hasta hace dos años estaba en paro. Actualmente se encuentra como fijo indefinido en la empresa y realiza el trabajo de técnico. Conoció la tienda a través de una página de anuncios en Internet y califica su trabajo como «una gran oportunidad» tras sus malas experiencias como empresario en varios sectores.
Otro caso es el de Javier Gil, un joven malagueño de 22 años que ha estudiado un grado superior en Administración y Finanzas. En la actualidad lleva de la mano de su novia un negocio de animación por las tardes, pero la necesidad de un trabajo por la mañana le hizo llamar a las puertas de Manzana Rota.
Llegó a la empresa hace dos meses y se ocupa de atender a los clientes. Javier aspira a ser «una pieza importante dentro de su trabajo».
Joseba Koldo tiene 23 años y a diferencia de sus compañeros viene de Huelva en busca de una oportunidad de trabajo en la provincia. Joseba ha estudiado un grado superior en Gestión de Eventos pero la necesidad de trabajo le hizo salir de casa. Manzana Rota ha apostado por él, y con su incorporación ha cerrado una plantilla de 22 trabajadores. En la empresa lleva una semana como dependiente.
Bajo coste y sin franquicias
Manzana Rota sigue apostando por la empresa de barrio que creó hace dos años, y continúa con la misma filosofía de bajo coste en las reparaciones.
Por el momento, la entidad prefiere no oir hablar de franquicias con las que pueda peligrar la esencia del negocio. Fran Martín aclara su postura: «Hemos rechazado estas ofertas por miedo a que al expandir la marca que hemos creado se vea perjudicada en alguno de sus aspectos».
