«Yo lo que quiero con esto es contar cosas», confiesa Diego Ceano. Desde 2003 el escritor malagueño está volcado en la pintura naíf, una palabra que viene del francés naïf y que significa ingenuo. «El naíf es la ingenuidad en el cuadro», recalca Ceano, que recuerda que fue Picasso uno de los primeros artistas en reconocer la impronta y genialidad del aduanero francés Henri Rousseau, pionero de este movimiento.

Diego Ceano detalla una de las múltiples historias que cuenta en sus cuadros, se trata de una escena del Perchel del siglo XVIII a la altura de la iglesia de Santo Domingo, aunque en primer término aparece el río Guadalmedina, «que se conocía como el caca seca». El cauce está lleno de vida: niños, perros, una mujer preparando un potaje, un señorito tratando de flirtear con una criada...

Esta evocación costumbrista es uno de los 66 cuadros que pueden verse desde el pasado 3 de noviembre en la I Muestra Internacional de Arte Naíf de Málaga, que permanecerá hasta el 15 de enero en la sala Málaga interior de la Diputación, en la plaza de la Marina.

Artistas españoles, franceses, ingleses y de Argentina en una iniciativa en la que participa Yanira, la nieta de Diego Ceano, de sólo 9 años, que presenta seis pequeños cuadros naíf. «Los cuadros los pintó cuando tenía 8 años. Yo se los dibujo y sobre el dibujo empieza a pintar y a meter el color», destaca el pintor.

23 de los cuadros son del propio Diego Ceano porque, en principio, iba a ser una exposición individual, pero pronto entraron en contacto otros artistas del naíf y terminó siendo una muestra colectiva. Los precios de los cuadros, por cierto, van de los 50 a los 950 euros.

Entre otras obras Ceano ha retratado la calle Atarazanas -un cuadro parecido se lo compró la presentadora de televisión Ana Rosa Quintana-, el muelle del puerto todavía con el silo, el paseo marítimo de Poniente, la ermita de Zamarrilla, el jardín de Pedro Luis Alonso con los nuevos mosaicos de los desaparecidos Ruiz de Luna, las regatas del Real Club Mediterráneo... «Mi maestro, el modelo que siempre he querido seguir ha sido Manuel Blasco, que además era un pintor que con los años pintaba mejor», explica.

Entre los participantes, Diego Ceano resalta el caso del pintor malagueño José Luis Pavón, «uno de los mejores pintores realistas y que nunca había pintado naíf» y que tiene sendas obras de la procesión del Cautivo y el Peñón del Cuervo de gran calidad, resalta.

El organizador de la muestra confiesa que la respuesta del público «me ha sorprendido, porque esto ha sido un boom», y destaca que le han llamado de otros puntos de España interesados por la muestra.

Llegar a los 75 artistas

La intención de Diego Ceano es celebrar la segunda muestra internacional en la nueva sede de la Diputación el año que viene con un cartel mucho más amplio de artistas: «Quiero llegar a 75 y ya tengo 34 reservados», cuenta. Su objetivo, igualar en número de pintores la muestra internacional de arte naíf que desde hace nueve años se celebra en Barcelona.

Diego Ceano está convencido de que en Málaga hay un plantel de pintores naíf amplio y de calidad, por eso aboga por que la ciudad pueda contar con un Museo de Arte Naíf. «Es algo que queremos reivindicar, sería un valor añadido para Málaga porque materia tenemos». Y quién sabe si en unos años no hay cuadros en él de Yanira Ceano.