Renfe ha iniciado el proceso para la compra de quince nuevos trenes de Alta Velocidad que permitirán la renovación de la actual flota de AVE, que ya cuenta con 10 años de antigüedad en algunos casos. El contrato, que asciende a 2.600 millones de euros, incluye la exigencia de que tengan una capacidad mínima de 400 plazas, lo que supone in incremento mínimo de entre el 11% y el 30% más que los actuales trenes de la serie S-102 y S-112, que cubren la línea de Málaga con Madrid, 318 y 365 plazas, respectivamente.

La adquisición de nuevos trenes AVE permitirá modernizar y ampliar la actual flota disponible por Renfe, que tiene que atender 1.000 kilómetros más de líneas de alta velocidad que hace 10 años. No obstante, el gran salto se dará con el incremento de las plazas disponibles, al especificar que estos trenes tengan un mínimo de 400 plazas, pero manteniendo una longitud de 200 metros, que se ajusta a los andenes de las estaciones de toda la red de Alta Velocidad.

Esta mayor capacidad permitirá ofrecer hasta 2.250 plazas más diarias en la línea entre Málaga y Madrid, con 25 servicios diarios atendidos por trenes AVE. Estas cifras incrementan en un 30% la oferta actual y, por tanto, la capacidad de crecimiento de esta línea.

Sin embargo, la entrada en servicio de estos nuevos trenes, que tendrían que estar para 2019 en activo, ofrece además la posibilidad de rebajar los precios de los billetes. La idea de Renfe es abaratar los costes con trenes de más capacidad, de forma que se pueda repercutir en las tarifas y atraer a nuevos usuarios.

Compra y fabricación. Los nuevos trenes que se quieren comprar, que se adjudicarán entre mayo y junio del año próximo, forman parte de un primer lote de 15 unidades, y con el objetivo de ampliar a otras 15 unidades hasta 2020.

Las especificaciones técnicas muestran que sean trenes con una velocidad de 320 kilómetros por hora, un mínimo de 400 plazas, 200 metros de longitud, coche cafetería, categoría de Turista y Preferente, accesibles, iluminación por LED y sistema wifi incorporado.

Los principales fabricantes de trenes cuentan con modelos que se ajustan a estas especificaciones. Los modelos Avril (Talgo), Velaro E y Euroduplex (Alstom), Zefiro (Bombardier) y Oaris (Siemens-CAF) podrían entrar en este concurso, ofreciendo entre las 600 plazas del Avril y el Zefiro -que ha sido comprado en Italia- y las 405 del Velaro E. En todos los casos las composiciones son de 200 metros de longitud (ampliables) y la velocidad máxima alcanza los 350 kilómetros por hora.

Una parte importante de este contrato es el mantenimiento de los trenes durante 30 años y su fabricación. En este punto está por negociar la posibilidad de que los talleres de la sociedad estatal Integria participen de una parte de esta carga de trabajo.

El taller malagueño de Los Prados cuenta con experiencia en fabricación y mantenimiento, con instalaciones acondicionadas para ello. Esto le coloca en buena posición para recibir una parte de esta actividad, lo que aseguraría su pervivencia durante varios años y la posibilidad de renovar la plantilla. El gran competidor serán los nuevos talleres de Renfe en Valladolid, con más de 130 millones de inversión y 78 hectáreas de superficie, lo que le sitúa como principal candidato para concentrar la actividad para amortizar la inversión.