­La Junta de Andalucía reconoció ayer que un cambio en uno de sus sistemas informáticos ha atrasado tres meses el abono de los pagos del programa de atención bucodental infantil a los dentistas acogidos a este plan, gratuito para los pacientes.

Según informaron fuentes de Salud, el cambio de la aplicación informática ha ocasionado el retraso que, según dijeron, se está solventando desde hace unos días. No obstante, aún quedan varias clínicas con impagos. Varias de ellas alcanzan los 2.000 euros correspondientes a más mensualidades que las mencionadas por Salud. En concreto, la propietaria de una de ellas se puso en contacto ayer con este periódico para denunciar que la Junta de Andalucía le adeuda la totalidad de 2015. Según le confirmaron ayer mismo, cobrará la deuda de las 11 mensualidades en los próximos días.

«La gente está empezando a facturar ahora, nosotros no hemos podido. Al principio creímos que se debía a un error informático pero nos enteramos de que cada vez éramos más afectados. Ahora, con esto de la aplicación han querido disimularlo, dudo mucho que todo el mundo haya podido facturar», dijo. Por este motivo, han decidido no volver a renovar el contrato de trabajo con la Junta de Andalucía tras la mala experiencia.

Este plan funciona desde 2002 con la garantía de la asistencia dental a los menores de entre 6 y 15 años de edad residentes en Andalucía. Según el portal de Salud, el niño tiene derecho a una revisión anual cuyo contenido mínimo incluirá instrucciones sobre normas de higiene bucodental, dietas, exploración de la cavidad oral, reconocimiento de la dentición permanente (utilizando sonda de exploración, espejo plano y el material necesario), incluyendo todas las fosas y fisuras existentes en el esmalte. Los dentistas cobran 30,74 euros brutos por niño al año.

Además, Andalucía también garantiza la atención bucodental a las personas afectadas por una discapacidad cuyo grado de severidad les impida colaborar al recibir un tratamiento odontológico, así como a las mujeres embarazadas. En Málaga hay más de 300 dentistas de cabecera a los que acudir, de los cuáles 270 forman parte de 123 clínicas privadas adheridas al convenio. Los padres de los menores pueden elegir de manera libre al dentista de cabecera, obteniendo información tanto en la página web de Salud como en los puntos de atención ciudadana de los centros de salud.

El presidente del Colegio Oficial de Dentistas de Málaga, Lucas Bermudo, admitió no conocer el problema, aunque recordó que el convenio entre la Junta y cada una de las clínicas es íntegramente privado. «La administración siempre paga con cierto retraso del que somos conscientes, no me consta que no se vaya a pagar y no sé el tiempo de demora, pero los colegidos no han hecho ninguna denuncia. Si fuera así intermediaríamos», apuntó.