La Consejería de Fomento ha llegado tarde a explicar el proyecto. Cuando ha empezado a dar sus razones se ha encontrado con una oposición vecinal muy fuerte y organizada, que de entrada se niega incluso a debatir otras opciones similares. No quieren que se toquen Blas de Lezo y Eugenio Gross, lo que les impide cualquier margen de maniobra.

No obstante, van a iniciar una campaña para difundir el proyecto e intentar explicar sus bondades. El 10 de diciembre se celebró una reunión en la junta de distrito, donde encontró un rechazo frontal y un auditorio poco dispuesto a debatir nada. La clave final estará en ver cómo evoluciona la opinión vecinal, ya que el delegado del Gobierno andaluz, José Luis Ruiz Espejo, se comprometió a no hacer nada que los vecinos no quieran.

Uno de los principales argumentos en favor del tranvía es la mejora de la movilidad para todo el barrio. La conexión de estas calles con la red de metro, que llega a centros de atracción de pasajeros y barrios muy poblados, es uno de los principales atractivos que defiende la Consejería. Los trayectos se harían más rápidos que en autobús -se tardaría menos de la mitad por regla general- y se aseguraría un transporte muy fiable en su frecuencia de paso, que rondaría los 7 minutos.

Fomento rompe una lanza a favor de la opción en superficie, que es lo que levanta más ampollas. Recalca que ayudaría a los comercios al facilitar la visibilidad de los escaparates para los usuarios, en especial cerca de las paradas. Además, se facilita la accesibilidad a la red de metro, al evitarse los ascensores y los tramos de escaleras mecánicas habituales en la red subterránea.

Su construcción es otro argumento que maneja la Junta a favor del tranvía, ya que permitiría reurbanizar todas las calles con una renovación de las aceras y de la infraestructura de saneamiento y suministros (telefonía, electricidad, gas), que conlleva una mejora de los servicios.

Esta regeneración urbana iría acompañada con un calmado del tráfico, ganando espacio para el peatón y reduciendo el paso de vehículos, que se estima en 23.000 al día. La Junta asegura que dos de cada tres de estos vehículos están de paso, por lo que se desviarían a otras calles, mientras se asegura el acceso a vecinos, aparcamientos y servicios de emergencia.

Fomento asegura que el tranvía también mejora la seguridad vial, una de las grandes preocupaciones de los vecinos. Así, afirma que las ciudades con tranvía son más seguras que las que apuestan sólo por el tráfico de coches. Las menores emisiones de ruido y de CO2 que el tráfico actual se ponen también como argumentos a favor.

El Ayuntamiento apoya el tranvía, con reservas

El Ayuntamiento de Málaga, al menos sobre el papel (y así está firmado en el convenio de 2013), apoya el proyecto del tranvía al Hospital Civil. Sin embargo, este apoyo ha tenido sus vaivenes. El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, ya ha señalado en varias ocasiones que no le gusta el proyecto al que se comprometió. No obstante, asegura que intentará ayudar a la Junta a convencer a los vecinos de las bondades del tranvía y vincula la viabilidad a que tenga el apoyo de los vecinos. Parece que así se guarda una salida para evitar este proyecto.