La reunión mantenida este martes en el Servicio Extrajudicial de Resolución de Conflictos Laborales de Andalucía (Sercla) ha terminado sin avenencia entre la empresa de limpieza Limasa de Málaga y los trabajadores, por lo que cada vez se aleja más la posibilidad de desconvocar la huelga indefinida prevista a partir del 1 de marzo.

"La empresa se mantiene en sus argumentos y en que no ve salida al asunto", ha manifestado el presidente del comité de empresa, Manuel Belmonte (UGT), por lo que de poco ha servido la intervención de los mediadores de este organismo de la Junta de Andalucía.

Tras la cita de este martes, la cuenta atrás hacia la huelga continúa sin que haya visos de un acuerdo que permita su desconvocatoria. "Los días van pasando y lo cierto es que las declaraciones de los miembros del equipo de gobierno no están ayudando mucho", ha declarado a Europa Press Belmonte.

El representante de los trabajadores hacía referencia así a las declaraciones de este martes del portavoz del equipo de gobierno del PP en el Ayuntamiento, Mario Cortés, acerca de que "el comité de empresa no está dejando opción a otra alternativa que no sea dividir el contrato" de cara a 2017.

Cortés ha afirmado, además, que "existe una diferencia abismal entre lo que piensan los trabajadores y sus representantes sindicales". De hecho, ha apelado a la plantilla para que "se replantee si sus representantes están haciendo un bien por la empresa, por la ciudad y por ellos mismos".

Para Belmonte, que, en nombre de los trabajadores, defiende la municipalización del servicio, "pretenden dividirnos, pero con estas declaraciones lo único que hacen es unirnos más". "La asamblea adoptó una decisión y el comité de empresa está para su cumplimiento", ha dejado claro, advirtiendo de que "la plantilla ya está cansada".

"Defender nuestros derechos, recogidos en un convenio y suscritos por una sentencia judicial, no es ningún chantaje", ha subrayado el presidente del comité de empresa.

Por su parte, Cortés señalaba este martes que las declaraciones del regidor, Francisco de la Torre, apuntando que el escenario para definir el futuro modelo que deberá regir el servicio de limpieza, una vez que acabe el actual contrato en abril de 2017, "está abierto", responden a su condición de "alcalde de todos los malagueños, caracterizándose siempre por su prudencia".

En su caso, sin embargo, sus afirmaciones, abogando por dividir el servicio en varios contratos, responden a las de portavoz del grupo del Partido Popular en el Ayuntamiento. "No tengo la misma carga de representatividad institucional que el alcalde", ha especificado.

"La postura oficial del Ayuntamiento, como no puede ser de otro modo, es esperar a tener los estudios de todos los modelos para tomar una decisión", ha manifestado el edil 'popular'.

Otra cosa es que "el grupo del PP, en boca de su portavoz, plantee que la mayoría de la opinión pública pide que ya está bien de chantajes y que quiere evitar futuras huelgas de Limasa para lo que la opción pasa por partir la empresa en seis lotes".

A su juicio, "así se ganaría en competitividad y al mismo tiempo se evitarían conflictos laborales". Una alternativa que, según ha insistido, respondería a la idea de "muchos ciudadanos que ya están cansados de que cada dos años los trabajadores de Limasa chantajeen a la ciudad", a través de la convocatoria de huelgas.

Huelgas, además, "preventivas", ha criticado el portavoz del equipo de gobierno del PP, ya que "primero las convocan y luego se sientan a negociar, y no al revés, como debería ser en cualquier negociación".

Alternativa más cara. Eso sí, a falta de tener el correspondiente estudio económico, ha reconocido que, a priori, la alternativa de dividir el contrato "rompe la economía de escala y podría resultar ligeramente más cara que el sistema actual" --una empresa mixta participada en un 49 por ciento por el Ayuntamiento, que se hace cargo de la limpieza, la recogida y el tratamiento--.

Pero, ha precisado Cortés, "ante un escenario en el que cada dos años nos piden una subida del sueldo de 10 millones, en tres años ya habríamos amortizado esa aportación de más". "Sería una apuesta a medio-largo plazo", ha apostillado.

En este punto, y ante la proximidad del paro indefinido, ha denunciado que "la postura del comité de empresa sea muy simple: o me dan 10 millones de euros o convoco una huelga". Ante esto, ha advertido, "la realidad es que en el presupuesto municipal hay consignados 2,2 millones para reforzar la plantilla, así que poco margen de maniobra hay".

En suma, "o renuncian a subirse el sueldo 10 millones o habrá huelga porque el Ayuntamiento no puede materializar un dinero que no tiene". "Es un tema de disponibilidad de recursos", ha concluido el portavoz del PP.