Con el futuro de las diputaciones afrontando un horizonte incierto, los portavoces de los diferentes grupos políticos que componen a la institución en Málaga han comparecido esta mañana de forma conjunta para desgranar las subvenciones destinadas a las inversiones en los municipios de la provincia en 2016. Un total de 24 millones de euros se repartirán en toda la provincia para desarrollar los proyectos correspondientes a través de los diferentes ayuntamientos. Según ha asegurado el presidente de la Diputación, Elías Bendodo, el impacto económico de estas inversiones está estimado en un total de 65 millones y se esperan generar unos 550 puestos de trabajo.

Bendodo, que ha descrito el estado de salud de las cuentas en la Diputación de Málaga como "muy buenas", se ha congratulado del "consenso y ha querido agradecer a todos los portavoces su capacidad para "dejar de lado los intereses particulares de cada partido para llegar a un acuerdo de forma conjunta". Además, el máximo responsable de la institución ha vuelto poner de relieve la buena gestión del equipo de gobierno popular a lo largo de los últimos años, señalando que el ejercicio 2015 se habría cerrado con un superávit que ahora hace posible invertir este dinero directamente en los municipios de la provincia. "Cuando llegamos a la Diputación, la deuda ascendía a 300 millones de euros", ha dicho para asegurar que "actualmente está en 73 millones de euros". En este sentido, también ha vuelto a dejar claro que el compromiso de acabar este mandato con toda la deuda amortiguada.

No ha querido desentonar en esta foto de familia el portavoz socialista en la Diputación, Francisco Conejo, quien ha defendido, además, la importancia de las diputaciones asegurando que con este acuerdo "reivinidicamos nuestra razóno de ser". Sobre el apoyo de su partido a este plan, ha asegurado que "el equipo de gobierno ha atendido por fin nuestra petición de que estas inversiones se centren en los municipios pequeños de la provincia". En un inusual ambiente de paz, Conejo ha señalado que este acuerdo es "un importante avances para que los malagueños se sientan orgullosos de sus representantes políticos".

En Ciudadanos, el portavoz de la formación naranja, Gonzalo Sichar, ha hablado de "lógicas diferencias polítcas entre los grupos políticos", pero ha asegurado que este consenso establece un ejemplo en la forma de trabajar en las diferentes instituciones que podría servir a otros ámbitos de la "política regional y nacional".

Por parte de Izquierda Unida, ha comparecido su portavoz, Guzmán Ahumada, agradeciendo también la "capacidad para buscar puntos de unión", aunque ha matizado en relación a la liquidación de la deuda que "podría ser un plan mucho más ambicioso si las leyes no nos obligarían a destinar parte del superávit a donde todos ya sabemos".

La única ausente en esta escenfifación del reparto de millones ha sido la portavoz de Málaga Ahora, Rosa Galindo, cuya ausencia ha sido disculpada por Bendodo asegurando que tenía un compromiso ineludible, aunque "le hubiera gustado estar presente".