El futuro modelo para el servicio de limpieza de Málaga, tras la finalización en abril de 2017 de la actual concesión, será acordado con «el máximo consenso posible». Esto es a lo más que llegó el pleno del Ayuntamiento tras aceptar el PSOE una enmienda del PP a su moción urgente y eliminar la exigencia de que la decisión final contara con una mayoría de dos tercios de la Corporación.

Aunque el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, no se mostró este pasado miércoles en contra de esa mayoría reforzada, en la sesión plenaria del jueves propuso el cambio de dicho planteamiento por «el máximo consenso posible; no excluimos a nadie, en un diálogo leal y transparente». Una modificación que hizo que el resto de grupos voten a favor.

De la Torre abogó por «un proceso de diálogo entre los grupos políticos, los trabajadores y la ciudadanía para abordar el nuevo modelo». «No descartamos nada, ni siquiera la municipalización, aunque la experiencia existente no esté tan clara, pero tampoco la privatización total».

También se acordó que el Ayuntamiento de Málaga negocie y cierre un convenio colectivo estable para las relaciones laborales en la empresa mixta Limasa, que evite futuros conflictos y huelgas.