El tren del Puerto de Málaga ha realizado las últimas pruebas antes de su vuelta al servicio normal. El lunes por la noche, desde las 21.50 horas, una locomotora de la serie 333 y cuatro vagones estuvieron probando las vías que conectan los muelles con la estación de tren de Málaga, donde enlaza con la red convencional de ferrocarril. Durante las tres horas de pruebas, operarios del Puerto de Málaga y de Renfe comprobaron el sistema de señalización y control del paso a nivel en el paseo Antonio Machado y las calles Ayala y Héroe de Sostoa, recientemente renovado con una inversión de unos 120.000 euros, así como del puente de hierro. El recorrido de este tramo se completó en unos 20 minutos, sin registrar incidentes.

Estas pruebas permitieron comprobar el correcto funcionamiento de esta infraestructura, incluidos los trabajos de restauración del puente de hierro, en el que se invirtieron unos 500.000 euros para adaptarlo a la normativa de Adif para el paso de trenes de mercancías.

Estos trabajos, además de consolidar la estructura de hierro, adaptó el puente al paso de vagones de tipo D4 y locomotoras S310, muy comunes en el transporte de mercancías, así como la serie 333, de motor diésel y de las más potentes de la red ferroviaria que opera Renfe. Estas últimas son las que protagonizaron las pruebas del lunes por la noche.

Graneles. La recuperación del tráfico de mercancías por la línea ferroviaria del puerto se produce tres años después del último tránsito, que fue de cemento. En este caso, los primeros trenes recorrerán esta línea a principios de junio, trayendo graneles en sacos para su exportación al Norte de África.

La idea es que los convoyes circulen por la noche, para evitar las afecciones al tráfico y reducir las molestias a la ciudad. Además, eso permite encajar mejor el paso de los trenes con el tráfico habitual de personas.