­Se acabó la división. Incluso, a nivel formal y de estatutos. Las asociaciones de hostelería Mahos y Amares, surgidas a raíz de la desintegración de la antigua Aehma, trabajarán a partir de ahora de la mano y bajo el amparo de una única entidad que recoge estrictamente en su fusión el nombre de los dos colectivos y a una abultada representación de sus anteriores juntas directivas. La organización, que estará presidida por Jesús Sánchez, hasta ahora responsable de Mahos, inicia su nuevo recorrido con el respaldo de alrededor de 300 socios que aglutinan en conjunto más de medio millar de establecimientos, la mayoría ubicados en zonas de gran concurrencia turística como es el caso del Centro.

Sánchez insistió en que la unión de ambas organizaciones, anunciada el pasado febrero en una multitudinaria asamblea, supone una oportunidad para «dignificar» al sector y avanzar en su profesionalización y corporativismo. Además, se refirió a algunos de sus retos más inminentes, entre los que figura la ordenación de las terrazas y la posibilidad de que Málaga cuente con un área grande considerada legalmente con la declaración de zona de gran afluencia turística.

La asociación Mahos-Amares contará con una vicepresidencia adjunta a la presidencia ocupada por el empresario José Porras. Asimismo, apoyará sus decisiones en un comité asesor en el que figurarán miembros de las anteriores cúpulas.

Porras se mostró satisfecho por el movimiento en firme dado por el sector, que ha decidido volver a funcionar de manera conjunta con el objetivo de ganar fuerza en el diálogo con las instituciones. «Queremos ser una organización que pueda asumir los servicios que tanto hoy como mañana pueda necesitar el sector hostelero de la provincia», precisó.

En la presentación, tanto Sánchez como Porras coincidieron en reivindicar la fortaleza de la hostelería en la ciudad y su aportación al mundo empresarial y a la economía. Entre los proyectos de la organización, además de los relativos al diálogo con las administraciones, figuran otros relacionados con la formación y la mejora de la oferta. Incluso, no se descarta iniciar los trámites para promover la creación de una cátedra universitaria ligada a la restauración y a la gastronomía.

Desde que iniciara su andadura, el colectivo Mahos ha multiplicado por seis su número de afiliados. Sánchez espera que, una vez perfilada la unión con Amares, la hostelería conozca un nuevo tiempo de unión y de solidaridad conjunta en la defensa de los intereses del total de los establecimientos.