El Ayuntamiento de Málaga volvió a insistir ayer en la exigencia de que la Consejería de Fomento y Vivienda de la Junta de Andalucía anule el proyecto básico del tramo Guadalmedina-Hospital Civil de la prolongación de la línea 2 del metro de Málaga, o lo llevará a los tribunales con la interposición de un recurso contencioso administrativo. La junta de gobierno de Málaga acordó ayer requerir a la consejería para reclamarle la anulación del proyecto, como paso previo al recurso.
Aunque la consejería acordó en marzo una nueva aprobación del proyecto básico del tramo al Civil, el Ayuntamiento estima que sin resolver los «aspectos sustantivos». El Ayuntamiento insiste en que la aprobación del nuevo proyecto básico es nulo de pleno derecho, existiendo, por tanto «una incapacidad» formal para su aplicación y ejecución; además se considera «lesiva» para los intereses municipales.
El equipo de gobierno del Ayuntamiento ya había requerido a la Junta el pasado mes de diciembre para que anulase el proyecto básico. Como respuesta la Consejería de Fomento realizó algunas modificaciones y realizó una nueva aprobación publicada en el Boja el 23 de marzo.
Esta nueva modificación tampoco ha convencido al Ayuntamiento que considera que aunque «resuelve algunos errores», deja sin resolver «los aspectos mas sustantivos del requirimiento municipal, por lo que insiste en requerir su anulación o en caso contrario presentará recurso por la via contencioso administrativa.
CCOO defiende el proyecto. Desde otro punto del escenario, el secretario general de CCOO de Andalucía, Francisco Carbonero, defendió ayer en Málaga la complementariedad de los autobuses urbanos y del metro en la capital malagueña, y lamentó que la polémica entre el Gobierno andaluz y el Ayuntamiento en torno a llevar el tranvía hacia la zona norte de la ciudad «esté bastante interesada políticamente». Por ello, instó a ambas partes a sentarse y buscar una solución.
Carbonero, que se reunión con trabajadores de las dos empresas, no entró en el fondo de la polémica que, por el momento, mantiene bloqueado y sin visos de solución el trazado del tranvía hacia el Hospital Civil, y sólo señaló que debe haber «un absoluto acuerdo» entre las dos administraciones, pues «no es posible estar en el rifirrafe cuando se trata de inversiones públicas porque eso hace que se malgaste el dinero»
«No es sólo criticar al Ayuntamiento de Málaga, opinó, si no que la Junta tiene que mejorar también, y mucho, su transparencia y su información a la ciudadanía y también a los propios trabajadores». Para Carbonero, «hay viabilidad y hay soluciones técnicas, sólo hace falta voluntad política».
El dirigente sindical anunció que pedirá sendas reuniones con el consejero de Fomento y Vivienda, Felipe López, y con el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, para exigirles «un compromiso firme» entre ambas instituciones para que la actuación acordada «nos cueste a los ciudadanos lo menos posible» y para que «la inversión pública se destine, finalmente, a la mejora de la calidad de los servicios». Carbonero insistió en la compatibilidad del servicio de autobuses urbanos prestado por la EMT, «esencial para los malagueños» y el de Metro de Málaga.
