Los ingenieros temen que continúen los recortes en el sector de la obra pública. Unas jornadas celebradas hoy en Málaga han puesto de manifiesto la dureza del ajuste económico sufrido en las infraestructuras, convirtiéndose en "el gran pagano" de la crisis, perdiendo sólo en Andalucía unos 300.000 empleos y ha cerrado el 35% de las empresas del sector. Sin embargo, los ingenieros mostraron su temor de que no hayan terminados los recortes y se extiendan a lo largo de 2017.
El decano de la Demarcación de Andalucía, Ceuta y Melilla de los Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos, José Abraham Carrascosa, que participó en la jornada ´El impulso de las infraestructuras en Andalucía: Málaga como punta de lanza´, defendió precisamente el final de los recortes y el inicio de una apuesta clara por la obra pública. "El ajuste no está justificado en la coyuntura económica actual, que alienta a fomentar la inversión pública, según ha argumentado e
José Abraham Carrascosa insistió en que la crisis económica ha situado a Andalucía como la de menor ratio de inversión por superficie y población, pese a sus necesidades de infraestructuras vitales para favorecer su avance económico y satisfacer las demandas sociales.
El decano de los ingenieros de Andalucía reclama que se recupere "la coherencia inversora" para mantener la competitividad y reclama un plan de inversiones de 65.000 millones de euros en la próxima legislatura, que permitiría crear un millón de puestos de trabajo y un ingreso del Estado a través de impuestos de 40.000 millones.
