­En plena polémica sobre la falta de contrataciones en la sanidad pública para afrontar los meses de verano y un día después de que el Colegio de Médicos de Málaga afirmara que los profesionales prefieren trabajar en otras comunidades ante la precariedad de los contratos que ofrece el Servicio Andaluz de Salud (SAS) para las sustituciones, ayer fue el propio consejero de Salud, Aquilino Alonso, el que reconoció las dificultades que está encontrando su departamento para cubrir servicios como el de Urgencias.

Alonso se refirió en concreto a la dimisión del jefe de Urgencias de Carlos Haya, Pedro Rodríguez y añadió que el director gerente del centro, Emiliano Nuevo, ya planteó la dificultad de encontrar profesionales para ese servicio. En este sentido, Alonso aseguró que «se están buscando profesionales médicos» e indicó que esta situación se produce «no por falta de contratación, sino por no encontrar a alguien que pueda prestar el servicio». Incidió en que el servicio está «garantizado» y que se publicarán las plazas «cuando se encuentren los profesionales». Sobre la dimisión de Rodríguez, el consejero adujo que se ha producido «por motivos personales».

«No es una dimisión, como he leído en los medios, que tenga que ver con las plantillas de las sustituciones de verano», reiteró Alonso, quien quiso «garantizar» la sanidad durante toda la época estival asegurando que «se cubrirán todos los puestos para ello».

«Con más de 13,5 millones de actuaciones sanitarias en Andalucía a lo largo del verano pueden comprender que la sanidad está como siempre, los 365 días del año y las 24 horas del día al servicio de los andaluces», añadió el titular de Salud, que lanzó un mensaje de «tranquilidad» y recordó que todos los veranos «se producen manifestaciones de este tipo».

En este sentido, quiso mostrar prudencia y se remitió al término de la época estival, «donde se verán las incidencias que se han producido». No obstante, dijo que esto es un «déjà vu» porque, como en casos anteriores, las incidencias son «escasas» y la atención ha estado «garantizada» porque se hacen «muchas consultas y se atiende a la gente que lo necesita».

«No podemos más». Por otro lado, personal sanitario de todas las categorías se concentró ayer en la zona de Urgencias del Carlos Haya, convocados por el sindicato CSIF, para exigir «los recursos necesarios para garantizar una atención adecuada».

«La situación es crítica, los enfermeros y médicos de Urgencias están sufriendo mucho las consecuencias de un plan vacacional insuficiente», dijo Antonio Osorio, responsable de Sanidad de CSIF Málaga. Pero ni mucho menos son los únicos. Tres alas cerradas en Carlos Haya; una unificación de plantas en el Materno con «muy malos resultados»; más de diez puestos de celador descubiertos a diario en Carlos Haya; o hasta 400 días que el centro debe a este colectivo por la acumulación de horas, al verse obligados a doblar turnos, describen el panorama con el que la sanidad malagueña se enfrenta a los meses estivales.

Tal es la falta de personal en el hospital que, según un miembro del sindicato, «algunos de los asistentes han tenido que cerrar su oficina de atención al público para poder asistir a la concentración porque estaban solos». También insistieron en que la respuesta del SAS «se basa en muchas mentiras y pocas soluciones». «No podemos más, los profesionales están muy cansados y esto tiene que salir por algún lado», apuntó Osorio.

Según sus datos, hasta el 15 de septiembre permanecerán cerradas 528 camas en Carlos Haya, Clínico, Axarquía, Antequera y Ronda, más de un 25% del total.

El CSIF no descarta convocar acciones que impliquen a la ciudadanía. «En función de lo que ocurra iremos tomando decisiones en cuanto a posibles movilizaciones antes de septiembre, cuando está prevista una gran concentración con todos los sectores de la sociedad en defensa de la sanidad pública», aseguró.

La delegada ve «normalidad». Por su parte, la delegada Territorial de Salud, Ana Isabel González, aseguró ayer en Vélez Málaga que la sanidad pública seguirá funcionando «con total normalidad» en verano, «como ocurre cada año, con una rigurosa planificación de recursos asistenciales que volverán a dar la respuesta necesaria a cada problema de salud que presente la población».

Asimismo, lamentó «los presagios catastrofistas y alarmistas de sindicatos y partidos políticos» que, según apuntó, pretenden «crear desconfianza en el sistema sanitario público andaluz y una alarma injustificada en la ciudadanía y en los miles de turistas que nos visitan, vaticinando año tras año una situación que nada tiene que ver con la realidad, demostrando una gran irresponsabilidad».

González detalló que el SAS destinará, en la provincia 12,5 millones de euros para el total de contrataciones dentro del Plan de Atención Sanitaria en Verano. Así, las casi 200.000 jornadas que se contratarán para sustituciones y refuerzos suponen un incremento del 9,3% del gasto destinado a este concepto con relación al verano pasado. En concreto, dijo, se aumentará un 11,7% el personal contratado para reforzar las zonas costeras y más turísticas.

Aseguró que todas las contrataciones de sustituciones se realizan «al 100% de la jornada, frente al verano anterior, tras el cumplimiento del compromiso del Gobierno andaluz el pasado diciembre de estabilizar en empleo público y devolver derechos a los profesionales, con el consiguiente beneficio en la disponibilidad de recursos».