El vicepresidente de la Diputación de Málaga, Francisco Salado, comparecerá mañana lunes frente a los tribunales para declarar como investigado en la causa que estudia el presunto acoso laboral sufrido por un trabajador del Consorcio Provincial de Bomberos por supuestos motivos ideológicos.

El mandatario del PP, que fue alcalde de Rincón de la Victoria en la pasada legislatura, está citado a las 10.15 de la mañana en el Juzgado de Instrucción Número 3 de Málaga, que será el encargado de dilucidar la veracidad de las acusaciones vertidas por el trabajador, al que apoyan el Sindicato Andaluz de Bomberos y la central ASED, que también participan en la denuncia.

Según pudo ayer saber este periódico, el caso tiene su origen en un procedimiento anterior que sentó en el banquillo a Abdeslam Lucena, antiguo responsable del Consorcio Provincial de Bomberos. La denuncia se presentó igualmente contra el propio Salado y el director técnico de la organización, Francisco Espinosa. La investigación también afecta al que fuera hasta hace muy poco responsable del consorcio, Manuel Marmolejo, que prestó declaración a finales de mayo.

En los papeles que obran en poder de los juzgados, el denunciante, que acudió a los tribunales en junio de 2014, asegura haber sufrido una «persecución política» en la institución por pertenecer, en calidad de militante, a un partido distinto al que dirige el equipo de gobierno. Los juzgados examinarán las sanciones interpuestas en el periodo al empleado.