Los vecinos de Huelin están llamados a concentrarse el próximo miércoles, 3 de agosto, a partir de las 8 de la tarde en la calle Mendoza, esquina con el chiringuito Pedro Gutiérrez, con el lema «Esto no es una playa», para protestar por la falta de arena en la playa de San Andrés.

La concentración, en principio de media hora, cuenta con la autorización de la Subdelegación del Gobierno, explicó ayer Francisco Moya, presidente de la asociación de vecinos Torrijos de Huelin, que precisó que la convocatoria ha partido de un grupo de vecinos.

«Estos últimos días la playa ha estado fatal y un grupo de vecinos, indignado, ha decidido hacer algo», señaló. Se da la circunstancia de que dos días antes, el próximo lunes 1 de agosto, la asociación tendrá una reunión con los responsables de Medio Ambiente y Playas del Ayuntamiento, así como con técnicos municipales para hablar de la playa. «Lo que queremos es que las administraciones pongan de su parte y que lo mismo Medio Ambiente, que la Autoridad Portuaria o Costas hagan un proyecto, pero que todas las partes se impliquen en una solución», pidió el presidente vecinal.

El pasado 20 de julio la asociación de vecinos ya denunció en este diario la situación de la playa por la falta de arena, mientras la concejala de Playas, Teresa Porras, pidió a la Autoridad Portuaria que se comprometa de aquí a 2017 a aportar 170.000 metros cúbicos de arena, de un total de 290.000, comprometidos a raíz de la construcción del espigón del puerto en el año 2000.

Las mareas y temporales han provocado que la arena de la playa se acumule en buena parte junto al espigón, «con lo que la arena se ha trasladado desde la glorieta de Antonio Molina a la parte de Echeverría», denunció ayer Francisco Moya, que lamentó que esta situación está creando división en el barrio, «porque los vecinos ya están hablando de la playa de los ricos y la playa de los pobres».

La asociación de vecinos expuso además el pasado 25 de julio en La Opinión que defiende algo más que un aporte de arena para estabilizar la playa del barrio. En concreto, el presidente vecinal mostró el plano de un proyecto, propuesto por un técnico, de construir un islote o bien espigón a unos 100 o 150 metros de la glorieta de Antonio Molina, en línea recta, con lo que «la marea tropezaría y no se llevaría la arena y la línea de playa se mantendría completamente como ocurre en la Misericordia», señaló Francisco Moya.

A la propuesta de la asociación el concejal de Medio Ambiente, Raúl Jiménez, contestó que bastaría la solución de aportar los 170.000 metros cúbicos de arena pendientes, sin necesidad de construir un islote o un espigón en el mar, con lo que ese aporte «quedaría basculando de este a oeste de la playa y sólo habría que ir moviendo la arena».

Sin embargo, Francisco Moya declaró ayer que «seguimos manteniendo el proyecto (del islote o el espigón) y no nos vamos a bajar del burro, porque se han vertido más de 160.000 metros cúbicos en tres tandas y eso no ha funcionado nada».

Una portavoz de Costas informó ayer de que el puerto de Málaga es el responsable de hacer el aporte de arena, algo que sí realizó entre 2001 y 2005, pero dejó de hacer a partir de 2006, cuando en el BOE se publicó el informe medioambiental. Costas sí ha hecho trasvase de arena en estos años pero falta la arena nueva que reclaman los vecinos.