­Se acerca septiembre y con él la temida vuelta al cole. Después de los meses de verano, son muchos los que padecen el síndrome posvacacional, algo que en los más pequeños se manifiesta como una sensación de miedo al cambio. En muchas ocasiones, el regreso a las clases puede suponer un problema en el estado de ánimo de los niños, por lo que es recomendable que las familias empiecen con una semana de antelación a prepararlos para el nuevo periodo lectivo, siempre destacando el lado positivo. En ello hace especial hincapié el pedagogo Enrique Sánchez, que reconoce que la clave está en «despertar la ilusión por el nuevo curso».

Cada vez está más cerca la vuelta al cole, ¿cómo se debe preparar a los niños para el regreso a las aulas?

Lo suyo es hacer una progresión. Se puede empezar una semana antes a asumir los horarios del curso, acostando a los niños antes y haciendo que se levanten temprano. Otra recomendación es que los padres despierten la ilusión en los chavales ante la nueva etapa. Esto lo pueden conseguir de varias formas: implicándolos en la preparación del material escolar y hablándoles de las cosas positivas que tiene el nuevo curso, como el encuentro con sus amigos y profesores.

Desde el punto de vista académico, ¿de qué forma debe llevarse a cabo la adaptación?

Las recomendaciones son muy parecidas a las que les damos a los padres. De hecho, algunos centros educativos, cuando empiezan los de Infantil, hacen una adaptación progresiva del horario. Además, los profesores tienen que contribuir también a desperar esa ilusión en los niños y, sobre todo, transmitirles apoyo y confianza. Muchas veces los niños tienen miedo porque piensan que no van a ser capaces de afrontar un curso superior y les hace falta una subida de autoestima, tanto por parte de los centros como de las familias.

Ha habido mucha polémica con el tema de los deberes. ¿Usted es partidario de que se mantengan o de que los niños no lleven tarea a casa?

La verdad es que ni una cosa ni otra. Los deberes tal y como están ahora no tienen mucho sentido, porque es una prolongación de la jornada escolar y es repetir lo que se hace en clase. Entonces, yo lo que haría es cambiarlos un poco, es decir, hay que aprovechar la situación que tienen los niños por las tardes para que hagan actividades con la familia. De la otra forma es muy monótono, provoca desmotivación y tampoco sirve de mucho. Quien no sabe, no va a saber más por muchos deberes que haga. Al final lo que estamos consiguiendo es que odien el colegio.

¿Qué técnica de estudio recomienda para superar los éxamenes con éxito?

Yo tenía una que consiste en hacer una primera lectura comprensiva subrayando, sobre esa lectura hacer un esquema, estudiarse el esquema y después reproducir el tipo de prueba que te van a preguntar en clase, ya sea oral o escrita. Para ello, es aconsejable contar siempre con la familia y que los niños se autoevalúen, vean en qué han fallado y vuelvan a repetir el proceso. No obstante, cada uno tiene que buscar el método que mejor le venga.

Por desgracia, el acoso escolar continúa siendo un tema de actualidad. ¿De qué manera se puede prevenir?

El programa KiVa, que se está aplicando en Finlandia, está dando mucho resultado y consiste en implicar a los niños en la detección del acoso escolar. Lo ideal es concienciar a los propios chavales de que sean ellos los que lo detecten y lo rechacen, y evidentemente, que lo cuenten. Es importante que el rechazo venga de ellos mismos y que no lo vean como algo normal ni lo valoren.

Una vez que se detecta un caso de acoso escolar, ¿cómo hay que actuar?

Lo primero que hay que hacer es proteger a la persona que está siendo acosada y, por otro lado, hay que reconducir la conducta del que está acosando. No solo queremos que desaparezca el caso sobre el que estamos actuando, sino que ese acosador deje de serlo. Por lo tanto, hay que tomar con él medidas reeducativas, no solo sanciones. Hay que enfrentarlos a las consecuencias que provocan sus actos para que vean el dolor que causan en la otra persona.

Una de las principales condiciones que ponen los partidos para formar Gobierno es la eliminación de la LOMCE. ¿Qué hay que mejorar en el sistema educativo español?

La verdad es que la LOMCE implica un paso atrás muy evidente en varios aspectos. Yo creo que lo que tendrían que tener en cuenta los partidos es a la gente que está a pie de aula, a los profesionales que están en esto, y hacer la reforma partiendo del conocimiento que tenemos general en la práctica y no solo a partir de intereses políticos e ideológicos. Los maestros solo quieren que se solucionen los problemas del día a día y eso tiene poco que ver con poner Educación para la ciudadanía o quitarla.

¿De qué forma va a afectar la reválida a los alumnos?

La reválida lo que hace es poner una nueva criba en el sistema educativo y dejar a los alumnos sin una segunda oportunidad. Fracasar en la reválida ya implica no tener la posibilidad de continuar con los estudios universitarios. Además, es una prueba pensada para que se haga por agentes externos que no tienen en cuenta los condicionantes que tiene cada aula. No es lo mismo hacer un examen en Los Asperones que en el Clara Campoamor.

@AliciaMartin_S