­De manera discreta y en ausencia de cualquier tipo de boato. De esta manera ha culminado el grupo del PSOE en el Ayuntamiento de Málaga el proceso de reestructuración forzosa al que se ha visto abocado, una vez que su hasta ahora portavoz y dos veces candidata a la alcaldía, María Gámez, anunciara la semana pasada su adiós anticipado de la políticaMaría Gámez. Con el respaldo de todos los concejales, María del Carmen Moreno fue ratificada ayer como sucesora de Gámez y pasa ya a ejercer de manera oficial como nueva portavoz de los socialistas en el Ayuntamiento.

Su nombramiento, que ya fue propuesto por la dirección provincial del PSOE el mismo día que Gámez anunció que no iba a acabar este mandato al frente del partido, sorteó así el último formalismo pendiente y Moreno ya está en disposición de liderar la etapa post-Gámez en el PSOE. En esta ocasión, con algunos cambios en lo que ha sido hasta ahora la identidad de la dirección, ya que Moreno estará acompañada en la dirección por los concejales Daniel Pérez y Estefanía Martín Palop, que también han sido avalados ambos como viceportavoces. Con la decisión de establecer esta especie de triunvirato, la dirección del partido pretende arrebatar cualquier posible foco de crisis interna que se pudiera generar entre Pérez y Martín Palop, ya que ambos, al menos sobre el papel, eran los llamados a liderar un proyecto que ha dado síntomas de agotamiento antes de tiempo. En el bagaje de Moreno lucen unos 25 años de trabajo en el Ayuntamiento, la mayoría de ellos como técnica en el grupo municipal socialista, y ahora se encuentra ante la misión de capitanear esta fase de transición en la que se ha embaucado el PSOE a falta de encontrar un candidato con posibilidades de disputarle la alcaldía al PP en 2019.

Porque una cosa está ya clara: ni Moreno, sin ambiciones, pero tampoco Pérez o Martín Palop son vistos por la dirección del partido como hipotéticos candidatos para liderar la carrera por el Ayuntamiento. Consciente de los numerosos vaivenes, con abandonos de numerosos ediles en los últimos años incluidos, el PSOE está buscando un candidato con garantías al que consolidar cuanto antes.

En un plazo inmediato, el grupo municipal socialista se ha adscrito a la misión de revitalizar el proyecto y, según aseguraron en un comunicado, «reforzar el papel de oposición útil y fiscalizadora». A pesar de la renuncia de Gámez, el PSOE quiere impedir que se vea minada su posibilidad de perfilarse como una alternativa al gobierno del PP.