La Guardia Civil ha detenido a un ciudadano irlandés de 30 años, dedicado al tráfico de drogas y armas, como presunto asesino de Gary Hutch, otro hombre originario del país del trébol considerado el matón del clan mafioso Kinahan, cuyo Padrino fue detenido en Estepona hace unos años. La muerte de Hutch sucedió el 24 de septiembre de 2015 en Mijas, cuando su asesino, que iba enmascarado, entró en la Urbanización Ángel de Miraflores y comenzó a disparar al fallecido. Este se echó a correr, pero su verdugo hizo lo propio. Lo hirió en el jardín y lo remató junto a la piscina.

Desde el principio, los investigadores sabían que se trataba de un ajuste de cuentas. El asesinato del niño bonito del Padrino irlandés abrió una guerra entre mafias irlandesas asentadas en España. Estas redes se dedican al tráfico de drogas a nivel internacional, el tráfico de armas y el blanqueo de capitales. Entre febrero y agosto, se produjeron en Irlanda y Calviá siete asesinatos, consecuencia directa del de septiembre de 2015 en Mijas.

Los agentes han hecho cuatro registros en casas deel entorno del asesino así como en un gimnasio de Marbella, donde se intervinieron coches, armas y móviles. Con esta operación, el instituto armado ha esclarecido la tercera muerte violenta ocurrida en Mijas durante el verano.

Antes de morir, Hutch recibió varios avisos. Era un hombre con más amigos que enemigos en los bajos fondos. En febrero de 2008, cuando se hallaba en Estepona, este irlandés fue herido cuando ejercía de chófer de su compatriota Paddy Doyle, otro narcotraficante con muchos antecedentes en su país. Él no tuvo tanta suerte y murió acribillado a balazos con tan solo 28 años.

Hutch era sobrino de Gerry Hutch, conocido como El Monje, un histórico gánster con referencias en la Wikipedia por su relación con algunos de los mayores atracos a mano armada de la historia de Irlanda.

El asesinado en septiembre de 2015 tenía antecedentes por asaltar a un empresario al norte de Dublín en 2001. Conducía el vehículo que llevó a los asaltantes hasta la mansión de la víctima.

En agosto de 2015, el excampeón de boxeo británico Jamie Moore se encontraba en Marbella entrenando a un púgil de la familia Kinahan, pero recibió dos tiros en Estepona cuando salía de casa de sus jefes. La Policía Nacional concluyó que el autor de los disparos se equivocó de persona y que el objetivo era Hutch.