Los técnicos de Athisa han realizado un último informe sobre el seguimiento de larvas de mosquitos en el Paraje Natural del Guadalhorce que concluye que no se han detectado larvas en ninguno de los puntos registrados y la presencia de mosquitos adultos es muy baja.

Ante los últimos episodios de estos molestos visitantes y la aparición de plagas durante el mes pasado, la empresa Athisa ha sido la encargada de los refuerzos para prevenir y controlar los mosquitos en los márgenes de la desembocadura del río, una labor que han realizado a través de la impregnación de productos larvicidas en el alcantarillado y los aliviaderos de aguas pluviales. Un sistema sustitutivo de la fumigación directa al aire para evitar riesgos de cara a la salud de los ciudadanos. Este plan de actuación comenzó a principios de agosto con dos intervenciones semanales en las zonas tratadas.

Con el objetivo de abarcar la mayor parte de las lagunas, durante la última visita se reforzaron los puntos de control. Doce lugares diferentes de este espacio natural en los que no se han detectado larvas y la presencia de mosquitos adultos era muy baja.

Este es uno de los últimos pasos en la lucha para acabar con las plagas de mosquitos que tantos quebraderos de cabeza han dado a los vecinos de diversas zonas de la ciudad y visitantes. El propio Ayuntamiento detalló hace escasos días que solo en agosto habían realizado hasta 44 actuaciones en diversos puntos de la ciudad, entre ellos, Guadalmar, Parque Litoral, río Guadalmedina, el paraje natural de la desembocadura del Guadalhorce y el arroyo Santa Lucía, son los más afectados.

Inspecciones programadas y tratamientos completos que se han sumado a las peticiones de los vecinos que han atendido. El distrito Málaga Este fue el que más solicitudes registró con hasta 21 peticiones. El resto de distritos se movieron entre 1 y 4, según informó el Ayuntamiento de la capital.