La nueva sede del Centro Oceanográfico de Málaga, que abrirá a principios del 2018 en el puerto de esta ciudad, situará a esta institución como "una de las punteras y con más posibilidades" entre las nueve instalaciones que dependen del Instituto Español de Oceanografía.

El delegado del Gobierno en Andalucía, Antonio Sanz, que ha visitado las obras del edificio, ha recordado a los periodistas que la vinculación de Málaga con el Centro Oceanográfico se remonta a 1908, aunque la sede se trasladó en 1983 a la localidad de Fuengirola, donde continúa, y ahora regresará a la capital.

La inversión superará los cinco millones de euros y el inmueble contará con unos 5.000 metros cuadrados de superficie, donde trabajará una plantilla fija de 66 personas, que alcanza en algunos momentos las ochenta, fundamentalmente investigadores, técnicos y funcionarios.

Ha apuntado que en el 2004 se produjo la primera petición del Ayuntamiento de la ciudad para que el puerto cediera un espacio con este fin, en el 2010 se firmó la cesión de los terrenos y el pasado 4 de julio comenzaron las obras, que tienen un plazo de ejecución de dieciocho meses.

Sanz ha resaltado la labor de "asesoramiento científico y tecnológico en torno a las ciencias del mar" que desarrolla este organismo, que atiende además los "compromisos de España con la UE en la investigación de los recursos marinos y de la sostenibilidad medioambiental".

También ha apuntado que este centro representa a España en distintos foros internacionales, colabora con veinticinco instituciones, entre ellas once universidades, y durante 2016 ha participado en dieciocho campañas a bordo de buques oceanográficos españoles.