­El vicepresidente primero de la Diputación de Málaga y presidente del Patronato Provincial de Recaudación, Francisco Salado, salió ayer al paso de las acusaciones del portavoz del PSOE en la institución supramunicipal, Francisco Conejo, de «torpedear» el proyecto previsto en el edificio de Correos y dijo que la Administración autonómica «también embarga a los ayuntamientos» de la provincia cuando les «retiene» lo que les corresponde de la Participación en los Tributos de la Comunidad Autónoma (Patrica) por las deudas con la Junta de Andalucía.

El pasado viernes, el Patronato de Recaudación notificó a la Junta el embargo de parte del edificio de Correos, concretamente de tres plantas, por la deuda de 8,76 millones acumulada por el Gobierno andaluz con 74 municipios y la Mancomunidad Occidental.

Salado acusó a Conejo de «mentir a sabiendas» al decir que el procedimiento de embargo iniciado impide la conversión del inmueble en un hotel. «Hay dos pasos, el cambio de calificación y la venta y este embargo no paraliza nada», afirmó. Defendió que están actuando con la Junta igual que con cualquier ciudadano. «Ellos tienen que dar ejemplo y pagar los impuestos», aseveró. Además, indicó que «todos los días hay embargos de cuentas, de nóminas, de casas y la deuda acumulada por la Junta es muy grande y sigue creciendo». «El Gobierno andaluz juega con ventaja porque en cuanto los ayuntamientos tienen deudas con él les retiene la Patrica», manifestó, al tiempo que pidió a Conejo «que no se dé golpes en el pecho».

Un proceder «normal». A juicio de Salado, el proceder del Patronato ha sido «normal». Sobre por qué no se ha negociado con la Junta antes de llegar a embargar, indicó que llevan negociando con el Ejecutivo autonómico 20 años .

«No son suficientes 20 años de recibos», se preguntó, reiterando que la Junta «no se anda con tantas negociaciones». «Hay cosas que hemos aclarado pero llega un momento en el que no tiene solución», apostilló. También se mostró sorprendido por el hecho de que Conejo se erija como «portavoz de la Junta». «Me ha sorprendido esa deslealtad a los municipios; ha traicionado la confianza de los ayuntamientos que lo eligieron como diputado por el PSOE», dijo.

El portavoz del PSOE en la Diputación acusó ayer mismo al presidente de la institución, Elías Bendodo, de «deslealtad institucional» y de intentar «torpedear» la venta del edificio. Conejo dijo que Bendodo ha actuado más como presidente del PP de Málaga que como presidente de la Diputación. «Esto es muestra de que usa la institución claramente con fines partidistas», apostilló.

Conejo denunció que Bendodo, por un lado, «pregona» el «espíritu del Caminito del Rey» para mantener relaciones «leales» entre instituciones y, por otro, «embarga a la Junta y ésta se entera por la prensa». También le achacó ser «un buen vasallo» de su homólogo regional, Juanma Moreno, «en su campaña andaluza». El socialista espera que la Diputación «tenga la misma diligencia» en cobrar «los 782 millones pendientes que tiene el Patronato con distintas administraciones y especialmente con contribuyentes, según la memoria de 2015». «Bendodo es un sectario porque cuando se trata de ayuntamientos gobernados por el PP la Diputación no embarga», aseguró.