Las larvas de mosquitos se resisten a desaparecer de la desembocadura del Guadalhorce. La semana pasada ya se hallaron larvas en varios puntos del río y este miércoles una nueva inspección ha vuelto a detectar larvas en tres puntos de la desembocadura, en uno de ellos con mayor presencia, según ha podido saber este periódico. En dichas zonas se ha procedido ya a comenzar un tratamiento para su eliminación.

Como ya ocurrió la pasada semana, la presencia de estas larvas se achaca tanto a las lluvias de este pasado fin de semana como a las altas temperaturas que aún sigue registrando la capital malagueña.