1. Espacios llenos de historia
El centro dispone de tres plantas a las que se puede acceder a través de unas escaleras decoradas con mosaicos. A las puertas del instituto hay dos entradas principales, la primera data del año 1706 y pertenece a la casa palacio de Baltasar Guerrero y la segunda, construida cincuenta años después, pertenecía a la Casa de Estudios del padre Rojas.
2. Más de 500 alumnos
Desde las 8.15 hasta las 22.15 horas, la céntrica institución acoge cada día a más de 500 estudiantes entre régimen general y enseñanza nocturna. «No nos asusta que en nuestras aulas haya 30 alumnos», afirma la directora, aunque confiesa que los docentes del Vicente Espinel deben esforzarse para construir el presente de los jóvenes.
3. Datos curiosos
Aunque no llegaron a asistir a clase más de cinco días, tanto Pablo Ruiz Picasso como Vicente Alexaindre hicieron el examen de acceso para ser alumnos del Gaona. «Cuando entramos aquí, decimos que adquirimos la enfermedad del «gaonitis» y es que, el instituto te atrapa. Todos los días aprendo algo», cuenta Julia del Pino.
4. La importancia del presente
«Yo les digo que aquí hay un pasado pero que ellos son el presente y que a ellos les toca escribir el futuro», relata la responsable del instituto, a la que reclaman varios alumnos durante el recorrido por el instituto. «Lo cierto es que impone estudiar en un edificio como este», dice Julia del Pino.
5. Próximos retos
El profesor de Historia, Francisco Pareja es un enamorado del edificio en el que trabaja. Por eso, cada año descubre y estudia uno de los rincones del inmueble. «El próximo año intentaremos hacer una exposición de las imágenes del Quijote que tenemos en el centro y que dantan del siglo XIX», cuenta el docente y organizador del 170 aniversario del IES Vicente Espinel.
