Gas Natural Andalucía, filial distribuidora de Gas Natural Fenosa en esta comunidad, tiene a Málaga como la segunda provincia de la comunidad andaluza en número de usuarios de gas natural. La compañía, que destinó alrededor de 14,2 millones de euros en 2015 para continuar con su plan de expansión y desarrollo en la provincia de Málaga, incorporó más de 5.600 puntos de suministro y aumentó en 40 kilómetros la red de distribución. Actualmente, lleva el suministro a 14 municipios: Alhaurín de la Torre, Alhaurín el Grande, Antequera, Benalmádena, Cártama, Coín, Estepona, Fuengirola, Málaga, Marbella, Mijas, Rincón de la Victoria, Torremolinos y Vélez Málaga.

¿Cuáles son los objetivos que se han marcado para 2016 ahora que se acerca el cierre de año?

El pasado ejercicio la compañía invirtió más de 14 millones de euros en Málaga, demostrando, una vez más, la importancia que tiene para nosotros esta provincia. Desde Gas Natural Andalucía estamos cumpliendo las previsiones que nos marcamos en nuestro plan de expansión y desarrollo para este año respecto a la conexión de nuevos puntos de suministro y al desarrollo de la red de distribución. Para la compañía a la que represento es fundamental contar con el apoyo de las administraciones locales y autonómicas y estar coordinados con ellos para continuar expandiendo nuestras redes y poder así llegar al mayor número posibles de malagueños.

¿Cuántos puntos de suministro tienen ahora mismo en Málaga y qué grado total de territorio cubren? ¿Y cuántos kilómetros tiene su red?

Málaga se consolida como la segunda provincia de la comunidad en número de usuarios de gas natural. La compañía cuenta con una red de distribución de gas natural, a fecha de 31 de octubre, de más de 1.250 kilómetros que lleva esta energía a más de 93.600 puntos de suministro de los sectores doméstico, industrial y terciario, lo que significa que más de 280.800 malagueños ya disfrutan de esta energía. Aún queda mucho por hacer en la extensión de la red y la promoción de esta energía. Andalucía es la quinta comunidad autónoma de España por número de clientes de gas, pero es una de las que mayor crecimiento registran en los últimos años. La saturación de viviendas con gas natural en la región es de un 17%, muy inferior a zonas climatológicas similares de Europa, por ejemplo el sur de Italia. En Málaga la saturación es de un 18% y la cobertura a la población es del 82%, aproximadamente.

De cara al cliente, ¿podría explicar en qué perfiles es más competitivo o económico el gas natural sobre otras fuentes de energías? ¿Podría detallar esas ventajas tanto en el perfil de hogares como en el de empresas?

El gas natural es una de las energías más limpias, cómodas y ecológicas de las que existen en el mercado, así como una de las energías de suministro continuo más económica, entre un 20% y un 40% de media en función del consumo y de la energía a la que sustituya. Una de las aplicaciones más extendidas de esta energía, sobre todo en Andalucía, es el agua caliente sanitaria, que permite una producción instantánea e inagotable de agua caliente, con la máxima economía, al funcionar sólo cuando se necesita y sin almacenamiento. La mayoría identifica gas natural con calefacción. Sin embargo, el gas natural tiene múltiples aplicaciones en el hogar Pero el gas natural no sólo se utiliza en el mercado doméstico; también tiene ventajas para los sectores industrial y terciario, donde representa una clara ventaja de competitividad derivada del ahorro económico que conlleva su utilización. Una de las características de esta energía es su versatilidad, pues puede emplearse en cualquier proceso de generación de calor o frío.

Entre sus clientes en Málaga, ¿son la mayoría particulares o también hay empresas?

Lógicamente, la mayoría de los puntos de suministro corresponden al mercado doméstico. Pero, el sector turístico es, sin duda, una de las columnas vertebrales de la economía andaluza y una de las prioridades de desarrollo para nuestra compañía. Para Gas Natural Andalucía, zonas como la Costa del Sol son prioritarias, por lo que la compañía trabaja en el desarrollo de estrategias y servicios que permitan al sector hotelero mejorar su eficiencia energética y reducir costes en su consumo. En este ámbito, el gas natural se presenta como un gran aliado para mejorar la eficiencia energética y el ahorro económico de los hoteles, ya que su coste unitario es el menor de las energías, representando ahorros del 25% al 35% sobre el propano y el gasóleo-C y de más del 50% sobre la energía eléctrica.

¿El gas natural preserva el medio ambiente?

Efectivamente, el gas natural es una de las energías más respetuosas con el medio ambiente. Es el combustible que emite menos CO2, por lo que el uso del gas natural contribuye a reducir el efecto invernadero. Pero, además, contribuye de forma crucial a mejorar la calidad del aire que respiramos en las ciudades, ya que, prácticamente no emite partículas, a diferencia de la biomasa y reduce entre un 40% y 60% los óxidos de nitrógeno respecto al gasóleo. En este sentido, uno de los usos más desconocidos del gas natural, pero con más recorrido, es el de los motores de los vehículos. Actualmente en Andalucía ya existen flotas de vehículos que utilizan gas natural para su funcionamiento, como los autobuses urbanos de Málaga. Los ahorros económicos conseguidos con estos vehículos son del 50% con respecto a la gasolina y del 30% con respecto al gasoil. Y además, se reducen de manera significativa las emisiones contaminantes: -85% NOx, -99% SOx, -95% partículas y -30% CO2. En la actualidad existen numerosos proyectos de movilidad, tanto terrestre como marítima, que cuentan con el gas natural como combustible. Hay que tener en cuenta que los vehículos de gasolina y diésel son los principales causantes de la contaminación del aire de las ciudades.

Recientemente ha sido inaugurada en Campillos por parte de otra firma la primera planta de biogás agroindustrial de Andalucía, ¿qué opinión tiene la compañía sobre esta energía?

El biogás es un combustible que se produce a partir de residuos, como por ejemplo basura o depuración de aguas, lo que lo convierte en una energía perfecta desde el punto de vista medioambiental. El desarrollo de esta energía no sólo supone un incremento de la eficiencia energética y una considerable mejora en la calidad del aire, sino que su uso puede contribuir a la mejora de la seguridad del suministro, a disminuir la dependencia energética y a cumplir los objetivos medioambientales de la UE.