La planta séptima del Materno Infantil debería ser la única que los niños malagueños visiten. Una zona llena de cuentos, actividades y juguetes que recuerdan a los pequeños que son niños y que su única preocupación ha de ser disfrutar. Pero la realidad es distinta. Cada año, 5.000 menores son ingresados en el hospital a consecuencia de padecer alguna enfermedad. Algunos están en el centro sólo unos días pero, otros, lo hacen durante meses.

Estas largas estancias y la necesidad de dibujar sonrisas en sus rostros llevó al centro sanitario hace años a ocupar la última planta del hospital con una ludoteca en la que las únicas jeringas que se utilizan son las de juguete. Pero a partir de enero, estos pequeños podrán olvidarse de sus padecimientos también al aire libre gracias a la apertura de la terraza Sea Life. Este espacio, que comenzó a construirse el 21 de noviembre, es fruto de una colaboración entre la organización La Varita Mágica de Merlín, de Sea Life, y la dirección del centro sanitario.

Las instalaciones, que disponen de 200 metros cuadrados, recrearán una playa llena de juegos y actividades sensoriales al aire libre con las que los niños disfrutarán sin necesidad de salir del hospital.

La recreación de esta playa mediterránea será respetuosa al 100% con el medio ambiente, ya que su construcción está llevándose a cabo con material reciclado en su totalidad.

La delegada de Igualdad, Salud y Políticas Sociales, Ana Isabel González, visitó ayer las instalaciones junto con el director gerente de los hospitales públicos de Málaga, Emiliano Nuevo, y la directora de Sea Life Benalmádena, Elizabeth Zorat. Estos se mostraron ilusionados por el proyecto, que calculan que podrán disfrutar a diario unos 20 niños y que permitirá que estos se olviden de la rutina hospitalaria. Así, tanto los responsables sanitarios, los profesionales del centro hospitalario como todo el equipo de Sea Life Benalmádena y La Varita Mágica de Merlín, confían en que esta nueva zona contribuya a la pronta recuperación de los menores.

Zorato señaló que el gran objetivo de esta iniciativa es que los niños tengan la vida más fácil en un proceso «difícil». «Los especialistas dicen que puede ayudar mucho en su recuperación», manifestó la directora de Sea Life Málaga, mientras que el gerente de los hospitales apuntó que el hecho de que los niños puedan salir al aire libre y disfrutar del clima externo les permitirá abstraerse de la parte médica que supone estar en el hospital. «Sabemos que cuando están ingresados están inactivos la mayor parte del tiempo y aunque tenemos una parte lúdica es fundamental esta, porque les da riqueza y calidad de vida», dijo.

Según fuentes del centro sanitario, la terraza contará con palmeras y casetas y se harán encuentros de participación para que los niños aprendan a entender cómo funciona el medio marino.