El centro de acogida para personas sin hogar Pozo Dulce de Cáritas cumple 15 años y por ese motivo todas las personas que lo integran (acogidos, voluntarios, trabajadores€) se unirán hoy miércoles, a partir de las 6 de la tarde en un encuentro festivo en el que habrá actuaciones teatrales, musicales y muchas sorpresas. Los actos de celebración comenzaron hace dos semanas con una eucaristía presidida por el obispo de Málaga, Jesús Catalá. Acto seguido, los participantes disfrutaron de un almuerzo compartido en el Hogar Pozo Dulce.

Desde que abriera sus puertas, en la casa han vivido un total de 283 personas. Actualmente, residen en este hogar 32 hombres y 7 mujeres. Para atenderles, Pozo Dulce cuenta con un equipo de ocho monitores, una psicóloga, una trabajadora social, tres Hijas de la Caridad, el director del centro, Francisco J. Jiménez, que sustituyó en el cargo a Sor Concepción Hernández hace tan sólo unos meses, y más de sesenta voluntarios. «Un gesto, un techo, un hogar» era el lema con el que se puso en marcha Hogar Pozo Dulce con motivo del Jubileo para acoger a las personas que vivían en la calle. «La compañía de Jesús donó la casa para que se rehabilitase, las instituciones públicas hicieron su aportación, Cáritas puso el resto y las Hijas de la Caridad su presencia diaria gratuita en el servicio a los acogidos», recordó la institución benéfica.

En los últimos meses se está potenciando el equipo de voluntarios de calle, con la incorporación de nuevas personas y la realización de un proceso formativo para mejorar el acompañamiento. Cuando el centro «Calor y café» abra sus puertas, ambos recursos trabajarán de forma coordinada entre sí y con las demás entidades unidas en la Puerta Única.