­Cada lunes el Aula Magna de la Facultad de Ciencias de la Comunicación en Málaga se llena de cine. Filmes distintos y para todos los públicos dilatan las pupilas de los asistentes a Cineforuma. «Es el único evento en la ciudad en el que se pueden visualizar hasta dos películas y se puede debatir sobre ellas», comenta César Lorente, estudiante de cuarto curso de Comunicación Audiovisual y uno de los coordinadores del proyecto.

Junto a él, Mateo Pérez y Jorge Reyna se sientan en una mesa a hablar pero, sobre todo, a pensar en su futuro. «Aunque hace cuatro o cinco años hubo el intento de hacer algo parecido por parte de un alumno no tuvo continuidad en el tiempo», comentan los responsables de una iniciativa que empieza a atrapar a propios y extraños. «Comenzamos a proyectar películas el año pasado pero ha sido este cuando se ha empezado a desarrollar de forma más oficial gracias al apoyo del decanato y, sobre todo, de Tecla Lumbreras, vicerrectora de Cultura», comenta Mateo, que aunque le hubiera gustado estudiar Bellas Artes, pasa sus días inventando un guión para contar todo lo que tiene en su cabeza. Jorge Reyna, sin embargo, cree que aún quedan muchas cosas por hacer. «Lo mejor que podemos hacer ahora es probar todas las oportunidades que nos ofrecen y crear una buena carta de presentación» .

Aunque no tienen miedo, son conscientes de que las cosas no son fáciles una vez que abandonen las aulas para cumplir sus sueños. «Yo soy optimista porque el mundo audiovisual está en todas partes», dice César Lorente que, aún así, en unos meses piensa cursar un máster de profesorado. «No me disgusta la docencia», sentencia. Mateo opina igual que su compañero y aunque estarían dispuestos a dejar todo por cualquier proyecto que les saliera, ambos abogan por construir un futuro desde una especialización en educación. «En este sector podemos tener un oficio de un día para otro», comenta César mientras sus dos compañeros asienten.

Diseño web, marketing, publicidad, producción, trabajar como guionistas y hasta ser directores de cine, los organizadores de Cineforuma son conscientes de las oportunidades del sector al igual que de las dificultades a las que se enfrentan.

Las señoritas de Rocherfort, Repulsión o Zelig son solo algunas de las películas que se proyectan cada lunes a partir de las 17.00 horas en el Aula Magna. «Tras el debate, al final salimos sobre las 21.00 horas», asegura Mateo, que está convencido de que la iniciativa tiene un brillante devenir.

El futuro del sector

Desde Procinema, la agrupación malagueña de productores, su vicepresidente, Ezekiel Montes, también es consciente de los retos a los que se enfrentan los recién graduados en Comunicación Audiovisual. «Si les gusta el cine, yo les aconsejaría que formaran parte de la Escuela de Cine de Málaga, allí se podrán especializar junto a actores y personas del sector», comenta el productor. Las ayudas procedentes del Festival de Cine de Málaga o el apoyo de las productoras para aquellos que estén empezando se incluyen dentro de las opciones de unos jóvenes que se aferran a las paredes de la facultad para evitar tener que pensar en el futuro. «Ojalá cuando yo estaba empezando me hubiera encontrado una productora que me recibiera con los brazos abiertos», añade.

Este mes de enero, los organizadores de Cineforuma piensan seguir creciendo, llegando a todos los sectores de una ciudad que ama el cine. «Aunque la Universidad financia la totalidad del proyecto, nosotros estamos poniendo dinero de nuestro bolsillo para aquellas cosas para las que no llega el presupuesto», comentan. Entrevistas o lograr que los directores acudan a los debates tras las películas se han convertido en unos de sus principales retos.