El que fuera sargento del Equipo de Delincuencia Organizada y Antidroga (EDOA) de la Guardia Civil de Málaga ha sido condenado a 18 años de prisión por pertenencia a un grupo criminal de se dedicaba al narcotráfico, además de blanqueo de capitales, falsedad, y conspiración.

El ahora condenado se fugó en septiembre de 2015 cuando iba a comenzar el juicio por esta causa en la que se sentaron también en el banquillo de los acusados supuestos traficantes, confidentes, una abogada y el que fuera jefe del EDOA de la Guardia Civil.

El exsargento, sobre el que pesó durante meses una orden internacional de busca y captura, fue detenido a finales del pasado agosto en el aeropuerto de Madrid, tras aterrizar de un vuelo procedente de México.

El pasado diciembre las acusaciones y la defensa del agente llegaron a un acuerdo tras reconocer el acusado los hechos y mostrar arrepentimiento.

Además de la pena de prisión se le condena a treinta y seis años de inhabilitación absoluta y cuatro especial para empleo público y a una multa de más de diez millones de euros.

En esta causa ya fueron condenados veintisiete personas, entre ellas un exjefe del EDOA, al que se le impuso una pena de diez años y medio de prisión por narcotráfico.

En la anterior sentencia se condenaba a las veintisiete personas a penas que sumaban un total de 102 años de prisión por los delitos de pertenencia a grupo criminal, contra la salud pública, falsedad documental, robo con violencia, tenencia ilícita de armas y blanqueo de capitales.

Al exjefe del EDOA se le condenó por dos delitos contra la salud pública y otro de falsedad y fueron absueltos ocho acusados, entre ellos cuatro agentes del instituto armado.