La Sección Primera de la Audiencia Provincial de Málaga, encargada de enjuiciar el caso Malaya contra la corrupción política y urbanística en el Ayuntamiento de Marbella, ha denegado conceder el tercer grado penitenciario a Manuel Sánchez Zubizarreta, abogado condenado a cuatro años de prisión por blanqueo continuado de capitales y a pagar una multa de 100 millones de euros.

Sánchez Zubizarreta está considerado uno de los principales testaferros de Juan Antonio Roca y, de hecho, desde su despacho madrileño se dio cobertura societaria a su inmenso patrimonio. Este letrado ingresó en prisión en enero del año pasado por esta trama de corrupción, una vez que la sentencia ya era firme, y sus abogados han recurrido un auto del Juzgado de Vigilancia Penitenciaria número tres de Andalucía en el que el juez deniega la suspensión del resto de la condena, su progresión penitenciaria al tercer grado y la libertad condicional. La Sala rechaza sus pretensiones y confirma íntegramente el auto de la primera instancia.

Pese a que todos los condenados en el caso Malaya a más de dos años cumplen pena desde hace más de un año, muchos de ellos ya están solicitando el tercer grado, pero la Sala considera que aún ha pasado poco tiempo y ve irrenunciable el pago de las multas y responsabilidades civiles.